tag:blogger.com,1999:blog-82468970010381005402024-03-13T23:37:11.647-07:00SolzimerLandEl Lugar a Donde Solzimer va Cuando SueñaSolzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.comBlogger38125tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-62679028807396157362014-02-11T10:16:00.002-08:002014-02-11T10:21:18.182-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://2.bp.blogspot.com/-Uxyw7ZzlSDs/Uvpn2hgnhII/AAAAAAAAAHo/PK1CkNfO6r8/s1600/eladversario.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://2.bp.blogspot.com/-Uxyw7ZzlSDs/Uvpn2hgnhII/AAAAAAAAAHo/PK1CkNfO6r8/s1600/eladversario.jpg" height="320" width="203" /></a></div>
<div style="border-bottom: solid #AAAAAA 1.0pt; border: none; mso-element: para-border-div; padding: 0cm 0cm 0cm 0cm;">
<h2 style="text-align: center;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif;"><b><span style="font-size: large;">El personaje que no fue</span></b></span></h2>
<h2 style="text-align: center;">
<span style="font-family: Arial, sans-serif; line-height: 14.4pt;"><span style="font-size: small;">El Adversario, de Emanuel
Carrére</span></span></h2>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: center;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"><b>Anagrama, 2013<o:p></o:p></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; mso-border-bottom-alt: solid #AAAAAA 1.0pt; mso-outline-level: 1; mso-padding-alt: 0cm 0cm 0cm 0cm; padding: 0cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;">El 8 de enero de 1993, Jean
Claude Romand asesinó a su esposa golpeándole la cabeza con un rodillo de
amasar, esa misma mañana les sirvió cereal a sus dos hijos y después los llamó
a su habitación y los mató de un disparo. Más tarde fue a casa de sus padres y
los asesinó junto con su perro. Luego trató de estrangular a su amante pero
ella se defendió y salvó la vida. Por la noche Jean Claude incendia su propia
casa no sin antes tragarse una gran cantidad de barbitúricos con la intención
de suicidarse, para su mala suerte es rescatado por los bomberos y pasa 8 días
en coma. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Si estos crímenes impactaron a
la sociedad francesa, lo que se descubrió después rebasó cualquier historia
conocida: Jean Claude Romand durante 18 años se inventó una vida, un empleo y
fue construyendo a base de mentiras un personaje amable y de buen carácter.
Nada de eso era real y a punto de verse descubierto, decide terminar con la
vida de quienes según él, serían lo más afectados al descubrirse la verdad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> De esto trata El adversario de
Emmanuel Carrére, un híbrido que mezcla la novela con la crónica y el reportaje y
que Anagrama publicó en 2013. Al terminar de leerlo se entiende que no había
otra manera de trazar un personaje tan difuso, dueño de una mente enfermiza e
insegura, víctima de largos episodios depresivos, Jean Claude es un hombre que
desde que dijo su primer mentira, ya no pudo dejar de hacerlo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Siendo estudiante de medicina
no presenta los exámenes de segundo año, después de eso, les sigue mintiendo a
sus padres y los hace creer que se ha graduado, luego dice que consiguió un
trabajo en la Organización Mundial de la Salud como investigador, y de ahí
deriva otra mentira que logra elevar su nivel de vida: les cuenta a familiares
y amigos que al ser empleado de la OMS tiene acceso a un programa de
inversiones de alto rendimiento, sin dudarlo sus padres, su tío paterno, su
suegro y hasta su amante le entregan grandes sumas de dinero, esto le permite
vivir en una zona residencial de Francia y llevar una vida normal con vecinos,
un amigo de los años escolares y con el cómite de padres del colegio al que
asisten sus hijos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Esa mentira que le da acceso
al dinero de otros, será que la que poco a poco lo va a ir cercando y lo
llevará a cometer los crímenes que lo hicieron famoso, antes de que eso
sucediera, su suegro le comentó que deseaba retirar una parte de lo invertido,
Jean Claude va a visitarlo y mientras reparan el techo de la casa su suegro
tiene un accidente y muere, hasta el día de juicio y al descubrirse toda la
verdad, la familia de su esposa sospecha que Jean Claude asesinó a su suegro al
verse descubierto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Luego su tío le reclama
también parte del dinero, su madre le dice que ha recibido una carta del banco
notificándole de un saldo negativo en la cuenta de su padre, y su amante le
pide la totalidad de su inversión, aquí Jean Claude pierde el piso y comienza a
planear la solución más adecuada y menos dolorosa para sus problemas: matarlos
a todos y después suicidarse.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> El libro de Carrére es
caótico, da saltos al pasado, relata las audiencias del juicio, los
testimonios, establece correspondencia con el mismo Jean Claude y, va armando en retazos la posible verdad de este hombre, la intención de Carrére es encontrar y exponer
un motivo sólido, una razón a los actos criminales de Jean Claude, poco a poco,
se llega a la conclusión de que el temor a ser descubierto es lo que atormentó durante 18 años, día
a día a Jean Claude, el hombre es un sobreviviente de su propia invención, ante
los demás, él es otro, y el verdadero ha ido desapareciendo, pero por las noches,
ya a oscuras, mientras trata de conciliar el sueño, Jean Claude sufre, y ese
sufrimiento lo hace extensivo, supone que los demás, aquellos a los que más ama
no sobrevivirán ante la verdad, los consumirá la vergüenza, serán humillados
por todos, señalados en la calle, eso no lo puede permitir, lo mejor, es
evitarles el dolor y la pena.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Jean Claude Romand cometió sus
crímenes con premeditación, así lo dan a conocer los investigaciones, preparó todo
lo mejor que pudo, incluso su propia supervivencia, nadie cree casual que haya
incendiado su casa exactamente a la hora en que pasaba el camión de la basura,
para que lo vieran y llamaran a los bomberos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="border: none; line-height: 14.4pt; margin-bottom: 1.2pt; padding: 0cm; text-align: justify;">
<span lang="ES" style="font-family: Arial, sans-serif; font-size: 10pt;"> Los psicólogos que lo
examinaron dudan que ese hombre sepa realmente quién es, hay la teoría de que
se haya quedado encerrado en medio de sus dos identidades: la ficticia y la
real. Emmanuel Carrére hizo lo que pudo, tratar de mostrarnos las dos sin juzgar
ninguna.<o:p></o:p></span></div>
</div>
Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-20805057229628895192013-06-10T13:13:00.000-07:002013-06-10T13:13:01.206-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://4.bp.blogspot.com/-hKY5JaonJcc/UbYwrCPRgkI/AAAAAAAAAHQ/DIc1ACjfyms/s1600/arteimsa.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://4.bp.blogspot.com/-hKY5JaonJcc/UbYwrCPRgkI/AAAAAAAAAHQ/DIc1ACjfyms/s320/arteimsa.jpg" width="195" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center; text-indent: 1cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif; font-size: large;"><b>Los oscuros hábitos del caos</b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center; text-indent: 1cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><b>Artemisa Café </b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 24px; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center; text-indent: 1cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><b><i>Israel Terrón Holtzeimer</i></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center; text-indent: 1cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Fondo Editorial Tierra Adentro, 2012</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: 0.0001pt; text-align: center; text-indent: 1cm;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Federico es un hombre que jamás he tenido un objetivo
en la vida, pasa de largo por las avenidas del desastre y el crimen, Diana, al
contrario, es la sobreviviente de una desgracia, ha sido devorada literalmente
por una ciudad en ruinas y desde la oscuridad ha resurgido como una ave fénix, incendiaria,
pero sin alas. Humeante todavía, decide que todo debe arder, y Federico, por fin ha encontrado en ella un objetivo: su desgracia personal.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;"><i>Artemisa Café</i> arroja a dos personajes a recorrer los
habituales pasillos del caos en un país que lleva un siglo cayéndose a pedazos
y al que sólo le hacen falta unos cuantos empujones para terminar siendo un
montón de polvo, esa es la fantasía que comparten Federico, Diana y ese grupo
misterioso llamado <i>Los Leopardos</i>, sueñan con la venganza, el derrumbe, Federico,
sólo busca que se extienda el vacío a su alrededor, que todos pierdan el alma
en un instante, al menos, en eso anda <span style="background-color: white;"><span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">hasta</span> </span>que encuentra a Diana, un ser sin <span style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">nada</span>, y cuyo vacío lo
devora todo, un alma inquieta pero gris, una mujer entregada al aire, adicta a
cruzar el vidrio de la droga y quedarse del otro lado, a pesar de lo tétrica y
violenta que puede ser la novela, en ocasiones parece una especie de Alicia en
el país de las pesadillas.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Los dos, juntos pero sin unirse nunca, no se enfrentan
a nadie, más que a ellos mismos, un par de sombras difusas desde antes de
conocerse, Diana regresó a casa de sus padres pero ya no fue la misma, Federico
se unió a las fuerzas policíacas, su inteligencia lo fue elevando de cargo, pero él, indiferente al prestigio y al poder siguió en su búsqueda de la luminosa
autodestrucción, consumiendo licor y tabaco al por mayor, sin temor a la muerte o al sufrimiento,
entonces conoce a Diana, esa estrella de luz oscura, ese astro de masa negra
que se inyecta galaxias en las venas para mantenerse alejada de este miserable
mundo.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Alrededor de ellos el caos ha sufrido una variante, la
Ciudad de México está en llamas, el gran cierre del desastre provocado por Los
Leopardos y su misteriosa líder llamada Artemisa está a punto de culminar en
los festejos del bicentenario, la misión de Federico es encontrar a dicha
líder, tiene sus sospechas, cree que es Diana, pero cómo saberlo si ella se ha pasado los
últimos días pegada a su encendedor quemando oscuridad, y
diluyendo el fin del mundo en su cuchara plata.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Ellos dos, los herederos del caos pasan el tiempo
recordando quiénes fueron, qué les hizo la vida, como el corazón se les fue
endureciendo desde hace muchos años, contemplan el fin de la ciudad que fue el
origen de este país abismado en su propia indiferencia.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">Violenta y salpicada de un humor negro poco habitual,
Artemisa Café es un viaje misántropico de alto nivel, sin nada de aprecio a lo que la sociedad ha decidido llamar
vida, Diana y Federico son dos cuervos negros dispuestos al exterminio y al
descenso, dos personajes que se preguntan ¿para qué lanzar fuegos pirotécnicos
si tenemos bastante dinamita?</span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; margin-bottom: .0001pt; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.0cm;">
<span style="font-family: Trebuchet MS, sans-serif;">P.D.: <i>Artemisa Café</i> obtuvo el Premio Binacional de
Novela Border of Words en 2012, el jurado estuvo integrado por Guadalupe Nettel,
Julián Herbert y Héctor Anaya.</span></div>
Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-17320261883570831302013-02-20T14:27:00.001-08:002013-02-20T14:33:38.424-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://1.bp.blogspot.com/-hXz9_AvOfiI/USVNoUe_-RI/AAAAAAAAAG0/PePbyRNHwIc/s1600/fabrica.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://1.bp.blogspot.com/-hXz9_AvOfiI/USVNoUe_-RI/AAAAAAAAAG0/PePbyRNHwIc/s320/fabrica.jpg" width="320" /></a></div>
<div style="text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: center;">
<span style="font-family: Calibri; font-size: large;"><strong>Tenemos que hablar de Vicente</strong></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: center;">
<span style="font-family: Calibri; font-size: large;">La fábrica de crimen. <em>Sandra Rodríguez</em></span></div>
<div style="text-align: center;">
<span style="font-size: large;">
</span><span style="font-family: Calibri;">Grupo Planeta, 2012</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">Tal vez pocos recuerdan uno de los crímenes más lamentables
del 2004 sucedido en Ciudad Juárez, digo esto, porque pocos hablan de él, es
probable que algunos hayan olvidado el nombre de su autor, y la mayoría ha de
ignorar cómo acabó está historia, al menos la de su principal protagonista:
Vicente León Chávez.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">La fábrica de crimen, de Sandra Rodríguez, es un libro que
nos ayudará a no olvidar el crimen y las circunstancias en que se dio. Un joven
de 16 años ayudado por dos de sus compañeros de escuela, asesinó a sus padres y
a su hermana, metió los cuerpos en una camioneta y les prendió fuego. Hizo todo
lo posible por hacerlo parecer un ajuste de cuentas del crimen organizado,<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>estaba seguro de que jamás sería descubierto.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">A partir de ahí, del crimen y las declaraciones del mismo
Vicente, Sandra Rodríguez comienza a seguir un hilo que no piensa soltar, la
historia de este joven que motivado por el alto nivel de impunidad que tiene la
ciudad, decide que es fácil hacerlo, que no hay ley que se lo impida, que lo
investigue y que lo encarcele, eso lo dice el mismo Vicente, no cree en la
policía ni en la justicia.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">Lo que me llama la atención en este libro, es que a pesar de
la enorme madeja de incompetencia, impunidad, complicidades y corrupción que ha
gobernado a nuestra ciudad en los últimos 20 años, Sandra Rodríguez no suelta
el hilo con el que empieza esta historia, y<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>a pesar de atravesar esa compleja red de eventos que sacudieron esta
ciudad, Rodríguez no quita el dedo del renglón: la impunidad es la causa de
este crimen, y la impunidad es causada por otros crímenes demasiado comunes sin
importar el partido que gobierne: negligencia, intereses políticos, corrupción,
incompetencia, falta de preparación y un largo etcétera.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">Durante el sexenio pasado se nos dijo hasta el cansancio que
el tejido social estaba roto, que los valores se habían perdido y por eso
Juárez, la primer ciudad que entró de lleno al desarrollo de la industria
maquiladora, también había abandonado a sus hijos, y que sus padres habían
empeñado el futuro de sus hijos por obtener mejores ingresos, ambas
declaraciones resultan absurdas, pero normales entre las autoridades y
gobiernos que han descuidado por décadas un derecho elemental de la ciudadanía:
su seguridad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">Se les olvida a esos estudiosos y funcionarios, que la mujer
no dejó el hogar por ejercer un derecho, sino porque un solo ingreso era
insuficiente para sostener a una familia. Y en cuanto a lo primero, a la perdida
de valores, ahí también ignoran algo elemental, los valores son opcionales, el
saberlos no nos obliga a usarlos, ellos lo saben mejor que nosotros, al igual
que sabemos que si hay algo que debe ser obligatorio y respetado es la ley.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">El caso de Vicente es el primero que logra un impacto en la
sociedad, tal vez, por ser un parricidio, o por la edad del homicida, la
cobertura de los medios, pero lo que vendrá después es una generación de jóvenes
asesinos reclutados por las organizaciones criminales que se disputan el
control no sólo de la ciudad, sino de la policía municipal y el centro de rehabilitación
para adultos (Cereso).</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">Leer La Fábrica del crimen de Sandra Rodríguez, es dar un
vistazo rápido, pero profundo a la decadencia total de una ciudad, decadencia
provocada por sus mismos gobiernos, en todos los niveles, pues las decisiones
que afectan a Ciudad Juárez se toman desde los tres niveles de gobierno.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">El libro cala hondo en varios sentidos, sólo nombraré tres:
el primero es ver cómo la mayoría fingimos no darnos cuenta del avance del crimen
organizado, los hechos y la información siempre estuvo ahí. El segundo es
descubrir el pozo donde está sumergida la ley en México, la justicia y los
programas de rehabilitación carcelaria, las tres son una perversa acumulación
de omisiones, incompetencias e indiferencias absolutas, por no llamarlas
complicidades o simple y llana corrupción, por último
duele comprobar que Vicente León Chávez tenía razón, los homicidios
perpetrados por el crimen organizado, jamás son investigados, hasta el día de hoy no se sabe en qué van las investigaciones de su asesinato, sucedido en agosto de
2009 donde fue acribillado junto a Iván Vital Castañón en un puesto de tacos, tenía apenas tres meses de haber salido del Cereso.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="font-family: Calibri;">La verdad duele, pero esa no es razón para olvidarla, por
eso insisto en que tenemos que hablar de Vicente. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
</div>
Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-86315629489168261382011-03-01T10:06:00.000-08:002011-03-01T11:21:45.594-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://lh4.googleusercontent.com/-D3heUcEadvg/TW00BUqh9YI/AAAAAAAAAGc/hmB7tZJV_lw/s1600/Presunto_Culpable.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" l6="true" src="https://lh4.googleusercontent.com/-D3heUcEadvg/TW00BUqh9YI/AAAAAAAAAGc/hmB7tZJV_lw/s320/Presunto_Culpable.jpg" width="228" /></a></div><br />
<div style="text-align: center;"><strong>Uno de tantos.</strong></div><div style="text-align: center;"></div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Presunto culpable</span> (México 2009)</div><div style="text-align: center;">Dir. Roberto Hernández</div><br />
<br />
<br />
<div style="text-align: justify;">Rara vez sale uno del cine temblando de terror e indignación, y ha de ser, porque rara vez las salas de cine apuestan por este tipo de material, en este caso, el documental <em>Presunto Culpable</em>, dirigido por Roberto Hernández en colaboración con Geoffrey Smith, nos muestra lo que ya sospechabamos: la impartición de justicia en México, es una farsa destructiva y cruel, pero cómo suele suceder, lo que suponemos es poco si lo comparamos con lo que en verdad sucede.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Presunto Culpable</em> nos presenta el caso del jóven José Antonio Zuñiga Rodríguez acusado y condenado a 20 años de cárcel por un homicidio que no cometió, lo que vemos en noventa minutos es la síntesis de los más de 800 días de encarcelamiento que vive ésta víctima de la justicia mexicana. Pero esto va más allá, quien ve este documental no regresa igual a la calle, habrá ingenuos que se asombren, paranóicos como yo que descubren que no lo son tanto, y otras personas que saldrán indignadas pero con la intención de promover la cinta y buscar otras manera de apoyar el cambio urgente que requiere la impartición de justicia en el país.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Lo que ahí se presenta, es sólo un caso de tantos, las estadísticas que maneja el documental son arrolladoras, todas las deficiencias penales alcanzarán a perjudicar a más del 90% de los procesados, entre otros datos, resalta por ejemplo que 90 de cada 100 detenidos jamás vieron una orden de aprehension, más de 90 de cada 100 enjuiciados jamás vieron al juez, y lo que es peor, algunos homicidios son resueltos para no investigados, la frase que me dejó helado, es aquella donde sugieren que en un juicio el acusado se enfrentan contra el expediente elaborado por las autoridades competentes, y como queda claro en la cinta, de competentes no tienen nada.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Roberto Hernández ya había realizado en 2006, <em>El Tunel</em>, un documental corto donde abordaba los absurdos de la impartición de justicia en México, es precisamente por este corto que los amigos y familiares de Antonio Zuñiga lo contactan para pedirle ayuda y orientación, al revisar el expediente descubren algo que da las posibilidades de reabrir el juicio: la cédula del abogado defensor es falsa. Desde ese momento, con la posibilidad de tener un nuevo juicio y conseguir un abogado de verdad, uno como espectador será testigo de todas las incapacidades y defectos del ser humano, ya no podremos pronunciar aquellas frases de <em>-a mi me dijeron</em>-, -<em>dicen por ahí</em>-, -<em>una vez me contaron</em>- porque lo estaremos viendo suceder en la pantalla, y tristemente rebasa a la peor historia que nos hayan contado.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Si yo salí aterrado del cine, fue por ver como personas investidas de cierta autoridad y que son las que velan por nuestra seguridad y además responsables de la impartición de justicia, ven eso como un simple trámite, una <em>chamba</em> y nada más, no son capaces de entender que en sus manos tienen la libertad y las vidas de muchas personas, me dejó temblando la indiferencia con que toman decisiones tan arbitrarias con tal de no afecter su puesto y el de otros, en palabras más simples, asistí a la porqueriza donde todos los cerdos se cuidan la cola para evitar que la verdad se las pise, un verdadero horror.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Ojalá puedan asistir a verla, parte de lo que se está recabando en taquilla es para elaborar más copias de las cinta y así lograr que puedan verla más personas, la estructura y edición del documental son bastante ágiles y precisas, cómo han dicho algunos críticos no tiene desperdicio, pero si algunos desperdicios de nuestra raza humana, ojalá nunca nos topemos con uno de ellos en nuestra vida y para estar seguros, hay que pasar la voz y apoyar la causa.</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-80619747129179931172010-10-04T09:32:00.000-07:002010-10-04T09:32:13.441-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TKn-mwkb-kI/AAAAAAAAAGQ/FGHMEV13140/s1600/infer.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" px="true" src="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TKn-mwkb-kI/AAAAAAAAAGQ/FGHMEV13140/s320/infer.jpg" width="226" /></a></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Una falsa farsa inspirada en la tragedia</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>El infierno, de Luis Estrada, Mexico 2010</strong></span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><br />
<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">En este país ya practicabamos una farsa con bastante éxito, ir a votar y creer que en eso consiste la democracia, sin embargo, el Estado que jamás se contenta con nada, decidió hacernos participar en otra: la guerra contra el narco, pero los papeles que se nos ofrecieron en esta obra no nos gustaron, desgraciadamente nos salen muy bien: civil muerto, civil herido, persona que duerme con miedo, sociedad que no confía en nadie, extorsionado, secuestrado, y otras mas extremas, alguien que ve sicarios con tranchete en cada auto que pasa por ejemplo.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Mi papel siempre ha sido el mismo, el paranóico que cree que el gobierno en su afan de protegernos de la ´verdad´, protege a todos los que nos causan un daño dosificado, como si dijera “pobre país, sí les dijera quiénes están metidos en este negocio del narco, seguro se me suicida¨, a estas alturas la tarea le puede resultar más sencilla, sólo tiene que decirnos “quiénes no” están metidos.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">A qué viene todo esto, a que Luis Estrada con su nueva película El Infierno, hace todo lo contrario, nos dice algo que ya sabemos, nos muestra algo de lo que somos testigos (más en esta ciudad), y nos demuestra que todo pinta para que las cosas sigan así.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La cinta creo que comenzó con la intención de ser una farsa, que fue escrita años antes de que todo empezara a crujir como los huesos de los muertos, pero que, dado el vértigo de sangre y odio que se desató en dos años, no tuvo más remedio que dejarse llevar por las circunstancias.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La concibo como una falsa farsa, porque toda exageración le quedó pequeña a la realidad, los números, esas cifras que avanzan rápidas como un ejército, devoraron cada chiste, cada intención de ser humor y nada más, lo que vi en la pantalla, si soy sincero, a mi ya me quedó muy lejos. A lo mucho me parece un documental antiguo con algunos chistes que ya no me hicieron reir. </span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Aún así puedo decir que la película me gustó y precisamente por todo lo que acabo de decir, aparte, admito que me encantan las groserías mexicanas bien pronunciadas y dichas con todas sus letras, nada de “inches, uey, ingados, utos y caón” , no ni madres, aquí los personajes hablan como nos gustaría hablar a todos, eso siempre me ha gustado, porque para decirlas así siempre hay que tener las razones claras, y si algo es claro, es que en un sitio como el que retrata la película, no se puede andar uno con cortesías ni eufemismos. Otra de sus virtudes es un excelente reparto que me sorprende por su equilibrio actoral a pesar de estar formado por tres generaciones de actores, nadie se come a nadie, y sus participación en la cinta esta bien definida.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La historia es simple, “El benny” regresa de Estados Unidos a un puebló que está peor de como lo dejó, él tampoco ha mejorado, y la vida de su familia tampoco, su hermano que era sicario fue asesinado y ha dejado una viuda y un huerfano, ante esta situación, “El Benny” decide hacerse cargo de las responsabilidades de su hermano, sin trabajo y sin opciones, no tiene otra que ir a pedirle jale a “El Cochiloco” amigo de la infancia y ahora líder de los sicarios que trabajan y protegen a uno de los dos hermanos Reyes, ambos controlan y gobiernar el pueblo de San Miguel Arcangel y se odian a muerte.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">A partir de ahí la historia sigue igual, en cuanto comienzan a caer los muertos, el humor tambien desaparece, ya no hay nada de que reirse, cuando la cinta termina acorralada por la realidad, yo como espectador me siento igual, no tiene gracia ser testigos de las venganzas interminables, del odio y la corrupción, la hipocresía y la miseria que nos han ido consumiendo durante todos estos años.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Aunque “El Infierno” realiza señalamientos muy concretos a la guerra iniciada por el presidente Calderón, no hay mucho de donde agarrarse, el deterioro social de San Miguel Arcangel es el que hay en todo el país y resultado de casi cien años de podredumbre política, es en ese pueblo donde veo la verdadera representación de nuestros días, en ese campo desierto y miserable, es en ese pueblo casi abandonado donde todas sus autoridades participan en la farsa de combatir el crímen donde percibo la crítica más directa y más acertada "esto no acaba de suceder, pero esto nos ha orillado a ver en el narcotráfico la única opción"</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Trebuchet MS;"></span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Tal vez a Estrada se le critique por no profundizar en el asunto, no creo que en el cine eso sea una obligación, el director cumple con atreverse en poner en la pantalla lo que ya imaginamos todos, la iglesia, los politicos, todas las autoridades judiciales y parte de la población estan metidos en el asunto, además, qué necesidad hay de profundizar en algo que ya salió a la superficie, en lo particular, creo que los habitantes de esta ciudad tendremos una percepción distinta, nosotros estamos más cerca de esa guerra que Luis Estrada nos presenta, tal vez para nosotros todo nos resulte más claro, menos chistoso, saldremos del cine pensando que no hemos visto nada nuevo, y tal vez con el corazón un poco más pesado, eso lo sabré cuando la cinta se exhiba por acá, porque paradojicamente, el único lugar donde no se ha exhibido “El Infierno” es precisamente en esta ciudad que en estos dos años para muchos ya se ha convertido precisamente en eso.</span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-67576593691051490642010-09-20T00:33:00.000-07:002010-09-20T00:36:09.195-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TJcJms77g1I/AAAAAAAAAGI/vMS5j1KckWE/s1600/silvio.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" qx="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TJcJms77g1I/AAAAAAAAAGI/vMS5j1KckWE/s320/silvio.jpg" /></a></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Silvio Rodríguez en Voces de América: </span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Un concierto para una sola voz</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span><br />
<div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Llegué al concierto de Silvio Rodríguez sin ninguna expectativa, así lo hago con cualquiera, aplico un metodo que aprendí por parte de un amigo: evité por casi un mes escuchar los discos o ver los videos del músico en cuestión (en este caso tenía años) y así, de esta manera, llegué dispuesto a la aceptación absoluta, lo que ves es lo que hay, en este caso, lo que oyes es lo que hay. Este metodo está lleno de ventajas, la principal, es que pase lo que pase, todo va a ser mejor de lo que esperaba.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Aún así, cuando vi la lista de canciones en el programa de mano mis expectativas bajaron más, por tres simples razones adolescentes, no estaban incluídas<em> Canción en harapos</em>, <em>En mi calle</em>, y <em>Cuando digo futuro</em>, bueno, dije, mientras no canté la del pinche unicornito azul estamos a mano.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">A las 8:30 inició la histórica participación de Silvio Rodríguez, y para mí que no esperaba nada, todo sucedió bien, claro que no era la voz de hace 40 años, ni los mismos arreglos, hombre, que ni Silvio era el mismo, (carajo, los años pasan y lo hacen peor si uno no se cuida) y las canciones tampoco fueron las mismas, lo que a mi me sorprendió fue como esa voz distinta y esos arreglos para el conjunto de cuerdas y vientos que lo acompañó, fueron sacando del ataud de mi memoria una legión de versos que creía muertos, y ahí sí, tuve bastantes razones para emocionarme, para empezar el darme cuenta de que mi alzheimer no era tan grave como pensaba, pero sobre todo, fue descubrir en alguna circunvolución de mi cerebro los recuerdos de aquel muchacho que fui y que prefirió escuchar a Silvio Rodríguez y dejar el rock en tu idioma para después, desde esa perspectiva todo dejó de importarme, y para mi ese concierto comenzó a tener valor. Hasta que cantó el unicorny blue, pero bueno, aquel muchacho que fui era más tolerante y prefirió pensar en otra canción mientras esta se terminaba.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El conjunto de canciones que interpretó esa noche, la mayoría de ellas, adquirieron para mi otro sentido en estas nuevas circunstancias, en esos años que las escuché por primera vez, esta ciudad era un sitio propicio para la libertad y para los sueños de cualquier chamaco de 17 años, ahora, con la ciudad sitiada, mis sueños estan habitados por algo peor que las serpientes, el concierto transcurría y no me puse a pensar ni en discursos, ni en ideologías o sistemas políticos, lo que me calaba hondo era lo adecuadas que eran esas canciones para este momento, me olvidé que este hombre es cubano, que estas canciones fueron escritas en otros años, para otras ciudades y con la intención de apoyar o rechazar otras guerras y no esta, aun así, cada línea para mi caía en su sitio, yo, a diferencia de muchos tengo en mi memoria a un jovenzuelo flaco y de lentes oscuros, puedo decir con certeza -<em>eso no está muerto, no me lo mataron, ni con la distancia ni con el vil soldado</em>- pero por desgracia, hay otros que no pueden decir lo mismo.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Cuando cantó <em>Pequeña seranta diurna</em>, hizo un alto en una frase, la dejo incompleta creo que manera intencional, ... <em>y quiero que me perdonen por este día mis muertos</em>..., dejó fuera la felicidad que acababa de nombrar, insisto, como queriéndonos decir algo.<em> El necio</em>, canción que jamás había escuchado, me gustó bastante, y no porque sea una declaración pro-cuba, sino porque algunas líneas coinciden con las cosas que mis padres han tratado de enseñarme con su ejemplo:<em> la necedad de vivir sin tener precio.</em></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Cuando llegó la tan esperada <em>Ojalá</em>, canción que se dice alguna vez le dedicó (mas no escribió) a Augusto Pinochet, yo le puse la cara de<em> “El Chapo”</em> al dictador, mi pareja la del presidente Calderón, y fue inevitable coincidir en la frase de <em>...tu viejo gobierno de difuntos y flores.</em></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Para cerrar, <em>La era esta pariendo un corazón</em>... y ese final que parece una lista de instrucciónes para casos de emergencia<em> </em></span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>debo dejar la casa y el sillón... por cualquier hombre del mundo, por cualquier casa, </em>y tan tán se acabó el asunto, algunos dicen que Silvio se portó mal, que fue muy seco, y claro, que no cantó las canciones que debiá cantar, en pocas palabras, todos llegaron con la expectavivas cruzadas, esperando acaso un milagro, un tierno apapacho, un mensaje de esperanza, creo que Silvio se fue por el otro lado, pongánle acción, la guerra es dura, el enemigo está aquí, en ustedes, que esperan demasiado de los otros, no sé.</span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Trebuchet MS;">Algunos dirán que Silvió ha cambiado mucho, que ya no es el mismo de antes, y yo me pregunto quién lo es a estas alturas. Creo que nadie, yo no, y eso no impidió que Silvio le cantara a ese muchacho que aún lo recuerda con bastante cariño en algún pasillo de mi memoria.</span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-91952253697171142642010-09-13T12:25:00.000-07:002010-09-13T12:25:01.415-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TI555E3-GEI/AAAAAAAAAGA/Aw9nEMxkZDY/s1600/images.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ox="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TI555E3-GEI/AAAAAAAAAGA/Aw9nEMxkZDY/s320/images.jpg" /></a></div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Ni una letra más al narco </span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">la postura de Pilo Galindo</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><br />
<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Tal vez no sean estas las palabras que usó Pilo Galindo durante su participación en la mesa Espejos de la violencia en la literatura mexicana, pero fue lo que yo entendí, después Elmer Mendoza de Sinaloa, insistió en que precisamente de eso debe de hablarse pues es lo que está sucediendo y como escritores no podemos negar la realidad.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">En ninguna parte Pilo Galindo sugirió negar la realidad, no habló de evasión o de cerrar los ojos, sí habló de las otras historias, de las otras personas, de los demás, de todo aquel que de unos años para acá adquirió la cualidad de sobreviviente.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Antes de entrar al territorio confuso de la escritura, la libertad y la realidad, dejo claro que apoyo la postura de Pilo Galindo, y las razones trataré de ponerlas en claro.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">De buenas a primeras, el negarse a escribir sobre el narco suena a cobardía, desde mi punto de vista es todo lo contrario, un escritor que decide poner un hasta aquí a tanta infamia, pero sobre todo a tanto poder, ya ha dado un primer paso, en principio hay que considerar que el narco está invadiendo todos los ambitos de la vida social, y que dicha invasión ya está controlando y transformando dicha vida en un encierro perpetuo, convivimos con el miedo y esto, ya lo han dicho otros, ya no es vivir.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El narco de hecho, ya invadió las librerías, llaménme paranoico, pero el narco busca todas las formas posibles de estar cerca de nosotros: en las salas de nuestras casas, en nuestras conversaciones cotidianas, por eso, el hecho de que un escritor decida no escribirle una sola letra al narco, es un acto de resistencia, un acto valiente que yo por lo menos, pienso seguir.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pilo Galindo tampoco dijo que negaramos la realidad, al contrario nos invitó a verla en su totalidad, en asomarnos a las orillas, a los margenes de cada historia, nos habló precisamente de eso, de las otras historias que suceden en y a pesar de la violencia, hay muchos sobrevivientes, hay muchas heridas, claro que hay muchos muertos, cifras y manchas de sangre en el noticiero o en el periodico, pero qué hay después de la noticia, qué sucede cuando las cifras pierden todo sentido de proporción, que pasa con lo que no aparece en la fotografías.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">De eso es de lo que quiere escribir Pilo Galindo, esas cifras tienen hijos, amigos, familia, una historia. </span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La del narco ya nos la sabemos, se escribe a diario con las palabras corrupción, impunidad, incompetencia, esa historia la leo todos los días, tal vez soy un ingenuo, pero esa historia no quiero que la lean mis hijos, habrá entonces que ponerse a borrar en vez de escribir, o como dice Pilo, negarles las palabras, cada letra irsélas quitando poco a poco. </span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Un escritor no puede seguir siendo el eco de la violencia, no debe prestarle su pluma al narco, al contrario debe ser la voz de sus victimas, de todos aquellos que a diario habitan una ciudad que está en medio de una guerra que no pidieron.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">En cada familia hay una historia de resistencia y de esperanza, por dar un ejemplo, este año se han abierto dos bibliotecas comunitarias, sin apoyo del gobierno, pero tambien se han cerrado muchas calles en distintos sectores de la ciudad, una de esas bibliotecas está en Villas de Salvarcar, lugar donde sucedió la masacre de 14 jóvenes estudiantes, y ahí donde el narco quizó dejar su huella, los habitantes no cerraron la calle, no pidieron más soldados, más vigilancia, es más, ni siquiera pidieron dinero, eligieron abrir una biblioteca, en pocas palabras dejarle espacio a la esperanza, porque donde haya libros que no hablen del narco, todo, cualquier cosa es posible.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Como esa historia hay más, porque son muchos los heridos que se han levantado, y estoy seguro que si los escucharamos, si contaramos sus historias, todos aprenderíamos mucho.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Gracias Pilo! </span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-75099958622577322162010-07-14T16:43:00.000-07:002010-07-14T16:43:15.455-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TD5F1IBatnI/AAAAAAAAAFw/QSS5faXRHEk/s1600/americansplendor.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" rw="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TD5F1IBatnI/AAAAAAAAAFw/QSS5faXRHEk/s320/americansplendor.jpg" /></a></div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">El tedio con monos*</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;"><strong>American Splendor de Harvey Pekar, <span style="font-size: small;">ilustradores varios</span></strong></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: Trebuchet MS;">Ballantine Books, 2003</span></div><br />
<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">American Splendor es un cómic que se publicó desde 1976 a 1987, escrito por Harvey Pekar e ilustrado por grandes dibujantes del genero, entre ellos el brillante R. Crumb. Pekar nacido de Cleveland es de origen judío, sin embargo, es un norteamericano común y corriente, salvo una diferencia entrañable. tiene un peculiar estilo para describir el vacío estadounidense. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pekar puede ser clasificado como el mediocre inconforme o el talentoso de espíritu plano, sus historias no tienen ningún matiz, todo lo ve con cierta lejanía y desaprensión que pareciese estar dictando datos a otra persona. Sus relatos aunque interesantes carecen de emociones, Pekar les ha quitado toda posibilidad de decoro, refinamiento estético, no son didácticos, y hay una monotonía en sus temas que termina convirtiéndose en algo intenso y poderoso. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Su personaje, que es él mismo, vive en un suburbio, tiene un trabajo de paga regular en el gobierno (organiza archivos en un hospital), divorciado dos veces, es tacaño hasta el exceso, no bebe mucho y prefiere no salir con los amigos, visto desde cualquier ángulo es un miserable, un alienado de sus tiempos. Se mantiene fuera de todo comentario común, en el la cuestión es si vale la pena cambiar, intentar ser otro, comportarse de otra forma, la respuesta es que en su caso eso es imposible. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Al obtener cierta fama percibe que la gente sigue mirándolo igual, el se siente distinto, ha publicado artículos en la sección editorial del periódico local, tiene un cómic que publica por sus propios medios y que poco a poco ha logrado cierto prestigio, incluso una de sus historias fue publicada en el New York Times, aun así, la gente lo sigue calificando de solitario y tacaño, para Pekar eso es sólo signo de que los talentosos no la tienen fácil en este mundo, y que importan más las relaciones públicas, el tener más dinero, es más fácil que cualquier imbécil sin talento se haga rico a que un pobre talentoso se haga famoso. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pekar es egoísta, todo sufrimiento existe cuando es propio, el dolor de los demás no importa, sufren por ignorantes, no tienen metas en la vida, no se exigen nada a ellos mismos, en su juventud Pekar fue un enfermizo coleccionista de discos de Jazz, su sueldo lo dividía en renta, comida y discos, eso era todo, después consiguió hacer reseñas para una revista de jazz, pero se harto de que sólo le mandaran reseñar basura, su esposa le reclama que es un egoísta y además un inconforme de lo peor, esto sucede un día en que Pekar sale de compras al super, la mujer le encarga café, al regresar el cartero le entrega un paquete de discos, la misma basura que ha reseñado en años. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-Hace años sufrías por que te dejaran publicar algo, ahora que lo has conseguido te la pasas quejándote, eres demasiado exigente contigo mismo, hay gente más jodida que tu y sacan provecho de lo que tienen, y tu? tu no, cada día te enfrentas con inseguridad al mundo, te preocupas por todo- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-Si ya lo sé, tengo mi salud y debería de estar feliz con eso, pero no es así como funciona conmigo, yo sé lo que quiero escribir, ya sé que tengo que disfrutar el mundo, mira es un día hermoso y yo aquí rechinando los dientes- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-y el café, se te olvido verdad, ya se que me vas a decir que no estaba en la lista de compras, por eso mismo te pedí que lo trajeras, eres un egoísta, sólo piensas en ti mismo, jamás te preocupas por los demás, sólo andas pensando en como los editores conspiran contra ti, eres tan intransigente que no eres capaz de esperar una hora mas para ir de compras, imbécil- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">ok, lo siento, voy por el, ok-</span></strong></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La tira termina en un cuadro terrible donde las miradas son expresivas, en ella hay coraje, en Pekar cansancio, tedio, un tedio infinito. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pekar es el hombre angustiado por que en realidad nada lo angustia, compra ropa usada, se alimenta con cereales y comida enlatada, no es feliz en su casa pero esta comodo, llega a pie a su trabajo, nunca coopera cuando en el trabajo quieren festejar a alguien, su pais le causa un emoción plana, casi inexpresiva, un estado distinto de conciencia, ni siente rechazo, ni repudio o compasión, no siente nada, se siente a el mismo, es un antinorteamericano completo. Un individuo ajeno al sentir nacional. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pero hay reclamos, ese vacío para Pekar debe ser causado por alguien o algo externo, en otra tira se ilustra un largo monologo sobre una situación desesperada: tiene en su casa cajas llenas del ultimo numero de su comic, no haya como venderlas, las tiendas de su amigos ya tienen suficientes, así que habla al New York Times, meses antes le habian publicado una tira, asi que trata de convencer al editor de que alguien haga una reseña sobre su trabajo, todo se queda en veremos, la esposa del editor parece interesada en el trabajo de Pekar, pero no quiere arriesgarse a reseñar un cómic, la revista tiene demasiado prestigio, Pekar decide mandarle una carta grosera a esta mujer, pero un compañero de trabajo lo convence de no hacerlo </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Para que, se van a reir de ti, esa carta si la leerán todos y solo atinaran a reírse, a decir que eres un mediocre rencoroso, déjalo asi- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-y si, así lo deje, ahora cada vez que alguien me hace una chingadera como esta de dejarme esperando y hacerme promesas que no van a cumplir, solo me queda hacer una cosa, hacer una tira como esta para desahogarme</span></strong></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Las historias de Pekar suceden en su oficina, en el parque, en el estacionamiento, a veces en su apartamento y en otras ocasiones en la calle, es raro ver algo de cinismo, salvo en una tira donde un amigo pobretón de Nueva York va a visitarlo, es una ostra, llega siempre a la hora de la cena o de la comida, Pekar le dice que es imposible que se quede con él, el amigo se queda con un familiar pero lo corren a los cinco dias, el amigo esta indignado, llama a Pekar y lo invita a comer, Pekar, que presiente las oscuras intenciones de su amigo, lo tuerce con una propuesta miserable, pero que el amigo se merece:</span></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-Mira, pues yo ya comí, porqué no mejor me compras tres dólares de verduras y latas y me las traes a la casa, es lo mismo que si me invitaras una comida- le dice Pekar </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El amigo vuelve a llamar y le pide que loacompañe al super para comprar lo que le haga falta. </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pekar va acompañado de su esposa e insiste con lo de las verduras </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-oye mi amigo, mira no traigo tanto dinero, mi familiar me echó de casa, y sabes una cosa, todo el tiempo que estuve con él tuvo el refrigerador vacío, y ahora que volví por mis cosas en la tarde, ya lo tenia lleno, un miserable- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-vas a comprarme las verduras si o no?- le pregunta Pekar.</span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-sólo traigo un dólar, si quieres te lo doy- </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-esta bien- dice Pekar </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Toma el dólar y en eso llega el amigo con el que se quedara el lastre de Nueva York, se despiden y cada pareja para su casa </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-vaya que costó trabajo sacarle ese dólar- dice Pekar feliz por única vez en todo el libro.</span></strong></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">En sus historias no hay magia, nada divino, nada fantástico, todo es decepción perpetua, la condena de lo uniforme, en una ocasión le ayudan a un amigo a llevar una enorme alfombra amarilla, la alfombra esta mojada, ha llovido, apesta y fácilmente se nota que es mas grande que el piso de la sala de su amigo, pero este insiste en que podrá usarla, la dejara secando y la pondrá en su sala. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">En la siguiente tira, el amigo le cuenta de una ocasión en que borracho y sin dinero aceptó el aventón de un viajero, se encuentran el cadáver de una ballena pequeña, están emocionados, así que deciden subirla al techo del auto y llevarla a casa, </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-era como esa alfombra amarilla que nos hizo batallar tanto- le dice el amigo </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-y a todo esto, que paso con la alfombra, la pusiste en tu sala- le pregunta Pekar </span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></strong></div><div style="text-align: justify;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">-no, la tiré, olía a rayos, tuve que tirarla, por eso me acordé de la historia de la ballena-</span></strong></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pekar no retrata al artista preocupado por la religion, la sociedad o el arte, sino al individuo que sueña con sobresalir haciendo solamente uso de un talento limitado, de una conducta prácticamente esteril, Pekar presenta por fin al artista medio de una ciudad pequeña, al artista que no se exige nada, que no quiere arriesgarse a perder la comodidad y la seguridad que le da una vida plana pero satisfactoria, el artista con bastante talento pero detenido por el miedo al vacio en el que ya vive. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Alguien como nosotros: opacos en todo nuestro esplendor. </span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Trebuchet MS;"><em>*E</em></span><span style="font-family: Trebuchet MS;"><em>sta reseña fue publicada originalmente en el 2003 en otro blog, lo hago de nuevo en memoria de Harvey Pekar, fallecido el 12 de julio de 2010</em></span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-12119002977156492652010-07-06T11:17:00.000-07:002010-07-06T11:17:46.593-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TDNyCLqJtPI/AAAAAAAAAFo/gUhzxWzGhzI/s1600/seddechampan.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" rw="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TDNyCLqJtPI/AAAAAAAAAFo/gUhzxWzGhzI/s320/seddechampan.jpg" /></a></div><br />
<div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Con sed de adjetivos y algo más</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;"><strong>Sed de Champán, Montero Glez</strong></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Random House Mondadori [!]De Bolsillo. 2004</span></div><br />
<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El interés de leer esta novela lo tenía desde hace tiempo, primero fue por una reseña de Arturo Pérez-Reverte publicada hace años, luego por una recomendación directa de Ricardo Vigueras, a pesar de ambas, el libro estuvo como seis meses en el librero, la verdad, fue hasta el tercer intento que pude leerla, al principio, no podía pasar de la primer página; acostumbrado a la liviandad descriptiva y a la narración directa de otros escritores, la novela de Montero Glez era para mí, lo más cercano a tratar de subir un barranco:</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Se trata de un hijo de la otra orilla, digamos de la parte baja del tobogán de la vida; crianza de negra cuna y linaje confuso; pellejo delator y un paso endiablado, el suyo, que repiquetea en las calles aún calientes, culpa del último sol de la tarde. A todo esto, y según su reloj de pulsera, pasan diez minutos de la medianoche. El perfil de la luna asoma ya entre dos casas y, a lo lejos, unos ladridos le informan sobre su condición de extraño. Sin embargo, llevado por esa familiar indiferencia que se gastan los solitarios, el Charolito sigue su camino por limpias aceras. Lo hace con garbo de torero suburbial y repeinado, curtido en la alta noche a punta de capote, directo a probar suerte.</strong></span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Tomaba el libro siempre desde este parrafo y por más que trataba, el pobre Charolito no podía robarse el Ferrari que tranquilamente lo aguardaba en la siguiente página, mis malos habitos de lectura no podían con ese estilo espeso atiborrado de una elegancia callejera y asuntos de baja ralea, confieso que me costó trabajo abrirme paso entre esa pandilla de adverbios y adjetivos que poco a poco me fueron acomodando en el pasillo de los que ya no vuelven al buen camino, robacarros, traficantes, padrotes y padrinos, toda una mezcla de los que no se juntan con uno por la desconfianza natural adquirida por sus nocturnas costumbres.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Así, después de haber recibido santo y puñetera seña, se me ha dejado asistir al montaje abigarrado de una novela negra oscurecida por el talante barroco que más que decorar, le agrega el estorbo y el tono necesario para narrar un carnaval de triquiñuelas, desvelos y traiciones, un desfile de personajes que van de la caricatura al esperpento, todo, en una Madrid que se cae de vieja y a la que los migrantes le salen hasta por las orejas.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>Con sed de champán</em> no es una novela fácil, primero está ese estilo que Glez depuró con exceso y que dio como resultado la mezcla de arrabales argentinos, gitanos y españoles, el acento sudamericano a más no poder y, aparte de eso, la manera en que las tramas del pasado persisten como una sombra que cubre todo lo que sucede, además, el Charolito cuenta otra historia, la última andanza de Emilio Mostaza, invención de el Charolito y capricho estilístico de alta costura elaborado por Glez, es otra historia haciendo ronda en los pasillos de este hotel fantasmal donde hasta los muertos alcanzan a contar algo.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>Con sed de champán,</em> es la historia de los que nunca han dejado de huir, porque jamás han dejado la costumbre de perserguir, de perserguirse el uno al otro como lo hace la Carmelilla, que va con sus catorce años y su cuerpo de dieciocho detrás de Charolito, aun sabiendo que dicho encuentro encenderá la furia de la familia: </span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Con el fuego por dentro, la piel caliente sobre los billetes gastados, se revuelcan sin pudor en lo más alto de la deshecha cama. Él se hunde; con un golpe certero penetra su cuerpo recién hecho, afectuoso y horneado, inocente y culpable a la par. Ella le recibe, siente su punzada y su respiración, cada vez más rápida, más sonora.</strong></span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Toda historia es simplemente una persecusión, una cacería de presas concretas, el último respiro de lo que se odia, es lo que persigue el Flaco Pimienta que le dejó la sentencia escrita a Charolito, otros buscan las monedas, otros esconderse de la muerte, todos persiguen y huyen de algo, y cuando estos motivos se cruzan con los de otros, es muy fácil que la muerte ajena se tropieze con uno y salude de pasada a otro, así de simple es el destino de los que prefieren no dormir desnudos, no tener puerta donde lo esperen y bar donde lo saluden, la novela de Glez es un laberinto de truhanes que han perdido hasta el apellido pero jamás ese retazo de corazón y hueso herido que llaman código de honor, reglas que cederán poco a poco al igual que las tablas viejas, pero que mientras duran, sirven para sostener el pasado y hasta el presente.</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>Con sed de champán</em> es sólo eso, las historias de hombres y mujeres que van con el corazón clavado en los talones del otro, el ajeno, el lejano, el que huye lo más rápido que puede, Si la leyeramos en voz alta resultaría en una radionovela negra perforada por el ruido de las balas, los jadeos de los que arriesgan la espalda por un cuerpo y los que no tienen nada que perder, Montero Glez toma el barrio bajo y lo pone ante nuestros ojos con escasa ternura, las ciudades están hechas de esto, una miseria huyendo de otra miseria, no hay otra cosa, nunca la habrá.</span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: Trebuchet MS;"><em>*En esta edición viene la lista de personajes (que son bastantes) al final, les recomiendo leerla antes de iniciar la novela.</em></span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-20821779536516405432010-06-29T16:58:00.000-07:002010-06-29T16:58:04.152-07:00<div style="text-align: justify;"></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TCqHBq3oUfI/AAAAAAAAAFg/DKdzzmCX3Fg/s1600/masrespet.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ru="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TCqHBq3oUfI/AAAAAAAAAFg/DKdzzmCX3Fg/s320/masrespet.jpg" /></a></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Amor, humor y des-humor o el arte de sobrevivir a la familia</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Más respeto, que soy tu madre. Hernán Casciari</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Grijalbo, 2006</span></div><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><div style="text-align: justify;"><br />
</div></span><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Hace unos años, cuando el blog era lo nuevo y todos tratabamos de entender dicho fenómeno, en otros lugares hubo personas que tomaron ese espacio para crear personajes virtuales, el más simpático de los que llegué a leer fue<em> Mirta Berttoti</em>, supuesta autora de <em>Diario de una mujer gorda</em>, en ese blog Mirta nos contaba de vez en cuando las suertes y desgracias de una familia de clase media que no paraba de hacer locuras, su hijo de en medio se la pasaba haciendo figuritas de mierda cuando iba al baño, la hija se iniciaba sexualmente, mientras ella poco a poco se iba retirando de dicha actividad recreativa, gracias al poco interés de su esposo, el Zacarías. Todo esto era contado con un estilo de humor bastante natural y sin pretensiones.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pocos fueron los blogs que tuvieron éxito, este, es uno de ellos, su autor Hernán Casciari obtuvo tanto que su creación ha sido llevada al teatro, el radio y por supuesto, un libro, en el 2005 su creación fue elegida como el Mejor Blog del Mundo por la revista Deutsche Welle, ahora en el formato de libro, tenemos la oportunidad de saber porqué.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>Más respeto, que soy tu madre</em>, tiene todo lo que una telenovela odiaría tener, humor, sexo, blasfemias, es politicamente incorrecta y no tiene ningún recato, aún así, el personaje que narra todas las fortunas y desventuras de una familia disfuncional, le agrega drama a cada página que escribe, como se le hecha sal a cada taco que uno se prepara.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El libro inicia con la llegada de su menopausia:</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Mientras escribo navego en una página médica, pero todo lo que dice allí no es ninguna novedad. ¿Tiene dolores óseos? ¿Tiene depresión, irritabilidad, angustia, insomnio? Sí. ¿Tiene molestias en las relaciones sexuales? Ni la más remota idea, señor médico virtual, porque el Zacarías no se toma la molestia de descubrirlo desde hace siglos, que se dice pronto. ¿Tiene mayor flacidez en las mamas? Sí, parecen dos quesos de Burgos. ¿Tiene sequedad vaginal? Tengo para mí y para regalar. ¿Qué más tiene, señora? ¿Qué más tengo? Tengo cincuenta y un años, ocho meses y trece días. Tengo ganas de llorar y de que alguien me abrace. Pero son las cinco de la mañana y toda la familia duerme como si en esta casa no pasara nada.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Después de eso, somos invitados a vivir la vida loca, ese largo y sinuoso camino que significa ser la madre de Toño, el tarado y mariguano de la familia, Nacho el hijo que era gay y después no, Sofi que anda por ahí descubriendo el mundo, Don Américo o el Nonno, abuelo mariguano, aprendiz de baterista y con un apetito sexual insaciable, la Negra Cabeza, primer novia del Toño a la que el abuelo se pasa por las armas, y el infaltable Zacarías, esa mezcla de macho fan del futbol y bebedor problema que resulta ser el esposo de la narradora que cada día que pasa lo sobrevive al borde de las lágrimas.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Así, sin más, Hernán Casciari me arrancó una que otra carcajada en esta temporada donde el humor es algo que se agradece, más cuando parece escasear entre lo que uno encuentra en las librerías, de hecho, el humor escasea en todos lados, y cómo no, si cada vez es más innasible, sigue siendo ese objeto oscuro del deseo de algunos, un sencillo aderezo cuya receta no le sale a todos, el humor es o no es, así de simple y terrible es el asunto, y Casciari logra andar con extraño equilibrio una historia sencilla: el principio de la tercera generación de la familia.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Lo que mas me sorprendió fue la capacidad para sostener el tono de mama campanita atascada de anfetas, pues ninguna madre que se precie de serlo sería capaz de soportar cualquier suceso de esta familia sin caer en el soponcio, por que la mujer aguanta de todo, que el Toño llega con una africana de novia, vale, que el Nonno y el Toño pelean por la africana y terminan en la cárcel, tambien pasa, que la Negra Cabeza (así le dicen a la muchacha) termina de sirvienta-mesera de la casa, pues como que ya es el colmo, pero la cosa sigue, Nacho el maricón una noche descubre que no lo es, esto sucede en una cena con los nuevos ricos del barrio, cuando el padre de Marilú los encuentra pegados como perros, con la madre jalando de uno y la Sofi de otro tratando de interrumpir tan incomoda situación, termina por golpear a el Zacarías, padre del ofensor: </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-¡Mi niña era vírgen, soldado Zacarías!- decía mientras pegaba y lloraba.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-Y mi niño era marica, soldado Pepe!- susurraba el Zacarías, sangrando feliz.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Antes de esto, cuando Zacarías no se hace a la idea de tener un hijo diferente se da uno de los mejores diálogos en el libro:</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-No, gracias papá; el pollo lo prefiero con mostaza.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-¿Pero alguna vez has probado la mayonesa, hijo?-le pregunta el Zacarías</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-He probado las dos cosas, y me gusta más las mostaza, papá.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-Pero habiendo tan buena mayonesa en este país -insiste mi marido- no me entra en la cabeza que te guste la mostaza.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-He estado cinco años comiendo el pollo con mayonesa solamente para aparentar -se sincera el Nacho-, pero ya me cansé.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Zacarías no da el brazo a torcer:</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-Igual nunca has encontrado una buena mayonesa que te haya puesto los pelos de punta…</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-No es una cuestión de calidad, papá -niega el Nacho- con la mayonesa no siento nada, en cambio con la mostaza soy yo mismo, y quiero sentirme orgulloso de comer mostaza.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-Tendría que haberte llevado a probar mayonesa cuando tenías doce o trece años- se lamenta Zacarías-, como se hacía antes.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-No es eso, no te culpes de nada.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>El Nonno, que había seguido la conversación muy serio, rompe la magia:</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-Bambino ¿e no has probado nunca la salsa roja, que é mayonesa e mostaza tutto a la vez?</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>-¡No seas pervertido, papá!- se asquea el Zacarías- ¿No ves que hay criaturas en la mesa?</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
<strong></strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El humor del libro es constante pero no excesivo, alguna formula secreta ha de tener el tal Casciari para no aburrir ni cansar, es dificil mantener tanta ocurrencia dentro de un espacio tan reducido, los únicos capítulos que fallan terriblemente, son aquellos donde el Nacho invita a cenar a su novio y éste insiste en que no son una familia real sino una agencia de publicidad tratando de colocar una novedad editorial en el mercado. No sé si esto fue una crítica a los reality shows que en aquellos años según algunos eran interesantes o fue cuando se descubrió que el autor del blog era hombre, como sea en el libro resultan fatales, rompen con una secuencia bien armada, un detalle que se agradece es el haber adaptado algunos datos para hacerla legible en México, los equipos de futbol rivales son el Guadalajara y el América, López Portillo y Vicente Fox son nombrados para aclarar ciertas décadas en la historia de la familia, supongo que en los otros países donde se ha editado este libro, hicieron lo mismo, demasiada atención a los lectores me sorprende.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><em>Más respeto, que soy tu madre</em>, es un libro dominguero, pero de los buenos, sus personajes se quedaron un buen rato conmigo, sus actos y desastres me divirtieron bastante, la ternura de la narradora jamás rebasó el borde del frasco de mermelada, y el equilibro de tonos y personalidades me sigue pareciendo genial, entre el cinismo, el impudor, la valentía y el sentimentalismo de todos, Casciari logra dibujar una familia casi real, salvo esa humor negro que en cada integrante tiene su peculiar manera de manifestarse, algo así como un gen enfermo que brilla de manera intermitente y que los hace únicos, respetables. </span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-86187386424562890492010-06-23T10:06:00.000-07:002010-06-23T14:12:04.395-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TCI98sWGIBI/AAAAAAAAAFY/v_YaTPgP3wQ/s1600/territorio.jpg" imageanchor="1" style="cssfloat: right; margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ru="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TCI98sWGIBI/AAAAAAAAAFY/v_YaTPgP3wQ/s320/territorio.jpg" /></a><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong></strong></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Noticias desde el infierno</strong></span></div><div style="text-align: left;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Territorio Comanche, </span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif; font-size: large;">Arturo Pérez-Reverte</span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Editorial Alfaguara, 2001</span></div><br />
<div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Hay autores que sobresalen en la brevedad, a pesar de que Pérez-Reverte es famoso por algunas obras que rebasan las 300 páginas, yo prefiero sus instantes de realismo y memoria fría, sus artículos compilados en Patente de Corso y Con animo de ofender, son textos que repaso cada año, sólo para admitir que nada ha cambiado, otro libro al que vuelvo con la misma frecuencia es Territorio Comanche, un recuento sin moral alguna de sus 21 años de corresponsal de guerra.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">21 años de contemplar la podredumbre humana resumidos en 136 páginas suena algo extremo, pero la realidad siempre lo ha sido, y esa podredumbre no ha dejado de existir, Pérez-Reverte lo sabe de primera mano y arma una breve historia en la que suceden todas las guerras anteriores, mientras Márquez, el camarografo de Barlés espera a que un puente sea derribado, siempre ha querido filmar uno al momento de caer, y ese día en Bijelo Polje, una ciudad al norte de Montengro en plena guerra, todo parece indicar que el viejo puente de piedra tiene las horas contadas, y es en esa horas de espera, donde el narrador recorre otro territorio devastado, la memoria de cada uno de ellos.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Sin preambulos, ni descripciones decorativas, y como simple corresponsal del infierno, Pérez-Reverte viaja del pasado al presente en las vidas de estos hombres que lo han visto y escuchado casi todo, niños con la cabeza aplastada, ancianos abandonados a su suerte en los asilos, una biblioteca en llamas, cadáveres por todos lados:</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Arrodillado en la cuneta. Márquez tomó foco en la nariz del cadáver antes de abrir a plano general. Tenía el ojo derecho pegado al visor de la Betacam, y el izquierdo entornado, entre las espirales de humo del cigarrillo que conservaba a un lado de la boca. Siempre que podía, Márquez tomaba foco en cosas quietas antes de hacer un plano, y aquel muerto estaba perfectamente quieto. Cuando tenía que hacerle un plano a uno, Márquez siempre accionaba el zoom para enfocar a partir de la nariz. Era una costumbre como otra cualquiera, igual que las maquilladoras de estudio empiezan siempre por la misma ceja. En Torrespaña eran famosas las tomas de foco de Márquez; los montadores de video que suelen ser callados y cínicos como las putas viejas, se las mostraban unos a otros al editar en las cabinas. No te pierdas ésta, etcétera. Junto a ellos, los redactores becarios palidecían en silencio. No siempre los muertos tienen nariz.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Así, en este ir de una guerra a otra comprendemos verdades muy sencillas, todas las guerras son la misma cosa, pisos que crujen al caminar sobre ellos, llantos, manchas de sangre, el penetrante olor de la orina en el encierro, rostros mirando hacia cualquier parte, miedo y una bola de hijos de puta cuyo corazón ha sido devorado por los tambores de la guerra. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Pérez-Reverte, tal vez sin proponerselo tambien hizo de Territorio Comanche un sentido homenaje a sus colegas, porque este libro esta lleno de otros corresponsales de guerra, de vivos y muertos, de los que sobrevivieron amargamente y de los que cayeron en desgracia por culpa del azar y uno de los hijos de puta que mencioné antes. Hombres que aterrizaron en sus países y terminaron sus vidas en un accidente de auto, o los que prefirieron arrugarse detrás de un escritorio al sacar cuentas y descubrir que entre las balas del próximo día una ya tenía su nombre.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Ante el horror de la guerra, el autor aún se da oportunidad de poner en claro el absurdo de los medios de comunicación, a los corresponsales se les piden comprobantes de gastos, y cómo compruebas el soborno a un guardía, la compra de gasolina a un contrabandista, o los servicios de un guía clandestino que tambien va huyendo de la guerra. Las facturas que se pagan son otras, el tratar de dormir en pleno bombardeo, el despertar antes de que una granada explote en el mismo piso de hotel donde te hospedas, el salir a cubrir el territorio y no saber si volverás a ver a tus colegas por la tarde, salir a ver el horror frente a frente y no obtener nada a cambio</span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Nada es tan frágil como lo que tienes, se dijo. Y lo más frágil que tienes es la vida.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Ahí en la calle, donde todas las ciudades en guerra tienen el mismo aroma: sangre y polvora derramada, Pérez-Reverte sabe que del otro lado los que contemplamos ese minuto de guerra en el televisor (minuto que le ha costado todo el día), no tenemos ni la puta idea de lo que es estar ahí, para nosotros la guerra es algo lejano y ajeno, algo que se puede resolver con buena voluntad y la colaboración de todas las naciones, de ese asunto no sabemos ni una mierda</span></div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Con los compromisos intelectuales, con los manifiestos de solidaridad, con los artículos de opinión de los pensadores comprometidos y las firmas de las figuras de las artes y las ciencias y las letras, los artilleros serbios se limpiaban el culo desde hace tres años</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Territorio Comanche narra estas horas de espera y esos años tras la sangre, esos minutos que Márquez pasa preocupado más por la bateria de su Betacam, que por la bateria enemiga que se acerca, esos segundos en que Barlés pasa lista entre sus vivos y sus muertos, entre el horror y sus fantasmas, ese instante en que toda la historia de un puente se derrumba y se esparce en la nada, como las vidas que se esparcen en nombres, en cifras estadisticas, en 30 segundos de transmisión, en nada. </span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-90251548703678414342010-06-08T13:54:00.000-07:002010-06-08T13:54:31.868-07:00<div style="text-align: justify;"></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TA6s8uPmeXI/AAAAAAAAAFQ/aFIpB2s6cq8/s1600/escafandra.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" qu="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/TA6s8uPmeXI/AAAAAAAAAFQ/aFIpB2s6cq8/s320/escafandra.jpg" /></a></div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Inmersiones: Crónicas del viajero inmóvil</span></strong></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>La escafandra y la mariposa. Jean-Dominique Bauby</strong></span></div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Plaza & Janes.1996</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Una tarde cualquiera conduces el auto con tu hijo a un lado, comienzas a sudar frío, y una cuestión cardiovascular te bota los breakers, veinte días en coma después, cuando despiertas, tardas en comprender lo que ha sucedido, sólo puedes mover el ojo izquierdo. ¿Tienes ganas de escribir un libro?</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Eso fue lo que hizo Jean-Dominique Bauby, quien antes de enfermar fue editor de la revista Elle en Francia, y es uno de esos libros que resaltan por su sencillez, su ausencia de intención, y ese peculiar humor que le pertenece a los enfermos. </span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Ante esa extraña situación clínica conocida como <em>locked in syndrome</em>, (encierro en si mismo) Bauby sabe que tiene pocas alternativas, ha dejado de habitar el mundo, él simplemente ya no es quien era, y antes de que la locura o la desesperación sean las única sensaciones posibles, decide tomar un tren hacia cualquier parte de si mismo. Viajes hacia la memoria, transcripción en tiempo irreal de cada día que sucede dentro del hospital, el aprender a comunicarse con el movimiento de un párpado y la lectura de un alfabeto en desorden, todo, con la simple intención de seguir dejando un rastro, una marca, algo mas que palabras escritas sobre el agua.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Sueños, pesadillas, recuerdos de viaje, la última charla con su padre, los planes que tenía para esa tarde cuando todo dejó de suceder, cada cosa que va contando Bauby a lo largo de su libro es parte de una construcción sólitaria, la torre de alguien que se aferra a no perder la cordura, y que prefiere externar todo lo que sucede dentro. Más allá de toda alegoría, el testimonio de Jean-Dominique Bauby es la primer transcripción de un hombre que está condenado a permanecer dentro de sí mismo, alguien que nos habla desde la más profunda tiniebla, alguien que en la soledad absoluta de cada hora que pasa, sólo tiene su imaginación y su memoria para huir de su circunstancia.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Bauby es un fantasma que recorre los pasillos de si mismo, encuentra las viejas galerías llenas de aromas, sonidos, personas, anécdotas divertidas y las confronta con su presente, todo está lejos de todo, mover un dedo es peor que tratar de levantar un edificio, saborear algo es simplemente imposible, acariciar o abrazar a sus hijos es un sueño que toda la vida fue algo fácil de realizar:</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Me ha invadido una oleada de tristeza. Théophile, mi hijo, está ahí sentado tan formalito, con el rostro a cincuenta centímetros del mío, y yo, su padre, no tengo siquiera el derecho de pasar la mano por su espeso cabello, de pellizcarle la nuca cubierta de pelusa, de estrechar su menudo cuerpo liso y tibio hasta sofocarle. ¿Cómo decirlo? ¿Es algo monstruoso, inicuo, repugnante u horrible? De pronto me derrumbo. Las lágrimas afloran y de mi garganta escapa un ronco espasmo que sobresalta a Théophile. No tengas miedo, chaval, te quiero.</strong></span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">La escafandra y la mariposa hacen alusión a los dos únicos pasatiempos que Jean-Domique puede realizar dentro de su cabeza, sumergirse en su memoria, o volar fuera del hospital para recorrer de nuevo las ciudades desconocidas, conversar otra vez con aquellas amistades que hoy lo miran con tristeza, en su memoria vuelve a saborear sus comidas favoritas, da largos paseos nocturnos por las calles solitarias, todo lo que sea necesario con tal de evitar la sensación de encierro, todo por hacer placentero el viaje inmovil en el barco más tenebroso del mundo: uno mismo.</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><br />
</span></div><div style="text-align: justify;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"></span></div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-63304050651307102242010-01-28T10:37:00.000-08:002010-01-28T10:41:13.289-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S2HVcZMiP8I/AAAAAAAAAFI/rlP1wNN1k0I/s1600-h/aforisweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" mt="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S2HVcZMiP8I/AAAAAAAAAFI/rlP1wNN1k0I/s320/aforisweb.jpg" /></a><span style="font-size: large;"></span><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: large;">Aforismos,</span> de Francisco Hernández<br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">Ediciones Monte Carmelo, 2002.<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #990000; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Pequeñas agujas para atravezarse la lengua </strong></span><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #990000; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>e inundar de sangre la garganta</strong></span><br />
</div><br />
<div style="text-align: justify;">Mis ideas sobre la poesía son muy simples, por no decir que limitadas, para mí, la poesía debe ser algo que brille, pero tambien algo que duela, no concibo al objeto estético en sí y para sí, para mi entonces cada poema debe ser como un vidrio, algo que multiplique las luces y las sombras, un espacio donde encontrarnos leve o totalmente con nuestro propio reflejo, pero tambien algo que corte, que deje una herida o regresando a lo anterior, nos ayude a reconocerlas por medio del reflejo y la multiplicación, cada poema debe ser una cicatriz compartida, un dolor que se contagie a travez de los sentidos de la vista y el oido, una sola línea debe de ser capaz de poner en claro las palabras turbias que habitan nuestra memoria. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Cuando me preguntan a cuál poeta mexicano le pertenecen mi admiración y mis pretensiones, respondo siempre con el nombre de Francisco Hernández, para mi no hay otro que se haya sumergido en los pantanos del dolor y haya salido de él para, precisamente, compartirnos las heridas, las cicatrices y el dolor:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Cuando era niño yo quería ser un poeta maldito. ¿Tú a qué jugabas?-</em> con sólo esa línea todas mis aspiraciones quedaron en el suelo, la leí hace mucho gracias a Bernardo Jauregui. Qué fue lo que entendí, que al comenzar a escribir yo no tenía idea de a qué estaba jugando, Francisco Hernández sí, pero sobre todo, reconoce que estaba inmerso en un juego peligroso. ¿Yo a qué jugaba? Ni siquiera sabía lo que estaba haciendo.<br />
</div><div style="text-align: justify;">No recuerdo cómo conseguí este libro, ¿fue una compra? ¿un regalo?, lo que viene a mi memoria es la frase del cintillo “<em>menos de cinco ejemplares vendidos</em>”, todavía me pregunto si habrá sido ocurrencia del propio Hernández, probablemente una burla precisa para sus años de redactor de textos publicitarios.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Estos aforismos aparecieron en forma de folleto en Comalcalco, Tabasco el año de 1997, la recopilación fue realizada por el joven tabasqueño Ervey Castillo, cinco años después, se publicaron de nuevo en una edición corregida y aumentada con un prologo de Marco Antonio Campos.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
En algunos de ellos, Hernández aborda el oficio de los que estamos condenados a depurar desde el silencio las palabras que la vida le va dejando en el camino:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-El poema es la huella que deja el homicida en el lugar de los hechos (la hoja en blanco es el crimen perfecto).-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-El lenguaje es la más pronunciada de las trampas.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-El poeta no descansa: el tiempo lo desgasta para probar que existe.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Ah, si las palabras se deformaran al escribirlas como cuando las gritas.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-¿Cómo escribirte en verso lo que miro, si en todas mis palabras hay ceguera?-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;">¿Qué hay en esas líneas? Todo, el lenguaje vuelto contra si mismo, la extravagante idea de que el oficio de poeta carece de belleza alguna pues le es imposible transcribir el dolor tal cual es, que el tiempo no es amigo de nadie, que a las palabras les es imposible ver aquello que nombran.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Hay una línea que es un verdadero grito de guerra, una declaración no de principios, pero si de origen y destino:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Yo soy el pararrayos de esta torre y soy la llave y la puerta del infierno.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;">Es una frase con clara pretensión maldita, hay que admitirlo, pero aquí lo que se aprecia es el acto de pronunciar en voz alta lo que la mayoría no se atreve ni a susurrar. Me agrada que diga <em>del</em> infierno en vez de <em>este</em> infierno, que no se limite a un territorio personal, que tenga la intención de incendiarlo todo.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
Por último están las frases que se refieren al amor, en Francisco Hernández hay una constante con la que estoy de acuerdo, el amor es una colección de ausencias, un cuarto donde se acumulan los fantasmas, las memorias más dolorosas, son las que dejan los amores que no sucedieron, amar es unir nuestras cicatrices sólo para formar una más fresca y más brillante, inventarse un dolor nuevo para no andar solos por la calle:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-La luz hiere. Al mismo tiempo deja ver la herida. El amor hiere, pero no descubre el tajo que produce.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-No volveré a tocarte, tu nombre ya no pronunciaré. Aquí sobre la espalda de un combatiente que agoniza, acepto la derrota y esta imbécil nostalgia por el reino.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Amo entrañablemente tu carne de fantasma.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Nada se de tu piel, sólo que está en la noche, amaneciendo.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Tu ausencia es otra devorante geografía-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Pero mientras el amor sucede, el dolor es tan tibio que adormece, las señales del daño estan ahí, pero uno eligirá siempre el riesgo de hundirse en los ojos de otro: <br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Nada como el tormento de desear a quien es libre de cumplir sus deseos.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-No tengo escapatoria cuando me miras para dejarme en libertad.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Otro día sin verte, sin poner mis pupilas encima de tus trampas.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-No hay labio que no sueñe con el zarpazo de una lengua insomne.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-El amor es lo que estos niños felices desconocen.-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;">Líneas que nombran la única trampa de la que no tenemos escapatoria, el deseo duplicado por la inconcencia, sueños habitados por una lengua que no duerme y que no pierde el tiempo en articular palabras, la ironía perpetuamente derrotada: la felicidad nada tiene que ver con el amor.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">En esta breve muestra de versos de Francisco Hernández que el jóven Ervey Castillo extrajo y presentó como aforismos, se ven las agujas afiladas en que pueden convertirse las palabras, esos gritos transformados en cuchillos para atravezar la piel de los insomnes, pequeños vidrios para iluminar a los que habitamos la <em>malaluz</em>, cada una de ellas y en conjunto nos están diciendo algo, un murmullo que debe permanecer siempre en nuestros oídos, antes de pensar en escribir ,hay que escuchar los epitafios de nuestra esperanza: <em>Nadie saldrá sin llagas de este incendio</em>. <em>Todos nacimos para ser olvidados.</em><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-46184674267827320412010-01-21T08:08:00.000-08:002010-01-21T08:09:13.306-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S1h6Fs8z5uI/AAAAAAAAAFA/6P8wDO4tEyU/s1600-h/grandezaweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ps="true" src="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S1h6Fs8z5uI/AAAAAAAAAFA/6P8wDO4tEyU/s320/grandezaweb.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">La grandeza del cine mexicano, Jorge Ayala Blanco</span><br />
</div><div style="text-align: center;">Oceano, 2004<br />
</div><div style="text-align: center;"><strong><span style="font-family: inherit;">La actitud del crítico ante una situación crítica</span></strong><br />
</div><br />
<span style="font-family: inherit;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">A Jorge Ayala Blanco lo leí en el periódico El Financiero hace unos cinco años cuando yo trabajaba en la universidad, antes de eso leí otras críticas en algunas revistas y suplementos culturales, siempre lo he considerado como el único crítico de cine mexicano, único en su estilo y hasta ahora el único que conozco que ve casi todo lo que se produce en el país, es natural entonces que su estilo sea agrio arido y ácido, consumir todo el cine de este país, no puede causar otra cosa que unas largas y terribles agruras. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Su trabajo no se ha reducido a las colaboraciones, desde hace años lleva publicando libros sobre cine mexicano, sus títulos, por alguna extraña razón consisten en una palabra que abraza todo el sentido de la obra, anteriores a este libro han aparecido <em>La aventura del</em>, <em>La busqueda del</em>, <em>La condición del</em>, <em>La disolvencia del</em>, <em>La Eficacia del</em> y <em>La fugacidad del cine mexicano</em>. Y sí, después de este libro sigue <em>La Herética del cine mexicano</em>, y con la I, pues se me ocurren bastantes palabras, supongo que a el autor también.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Esta palabra con la que titula cada uno de ellos es manejada en todos los sentidos, en este caso la grandeza se ve con ironía y seriedad, pasa por la grandilocuencia y esa insoportable “grandeza” que ya no existe pero se trata de aparentar, de esta forma Ayala Blanco critica cerca de 95 producciones cinemátográficas entre películas, cortos y documentales realizados de 1997 al 2003, y hay de todo, ironías simples, ataques de pánico y comentarios tan ácidos capaces de atravezar una butaca de cine, admito que el estilo es díficil, pero al pasar de las páginas va adquiriendo sentido, díficil para uno, que que confunde las reseñas pederas de las revistas “especializadas” con crítica cinematográfica, esta última no pone estrellitas o pulgares abajo, esta se sumerge realmente dentro de lo que está presenciando, hace una lectura de lo que hay y por supuesto de todo lo que no hay en la pantalla, como todo producto salido de México, el cine tambien consiste en excesos y en carencias, no hay punto medio, se pretende siempre ser la obra totalizadora a partir de abarcar historias dispersas y todos los filtros posibles, todas las técnicas de edición, pero siempre, seguiremos tenendo el peor sonido que existe. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Ayala Blanco pone todo en contexto: las antecedentes del director: dónde estudió, que hizo antes, quien escribió el guión, con que fondos se financió la cinta, y eso es nada más para empezar y para dejar en claro que el cine no es obra de una persona, lo que sigue es una sinopsis de la historia, el conflicto en sí resuelto en tres o cuatro parrafos:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Ni mucho ni poco ni mucho menos Demasiado Amor, al menos según la cinta con ese demasiado título de Ernesto Rimoch (2000). En lo que se reune con su hermana mayor Laura (Ana Karina Guevara) que partió a España en pos de nuevos horizontes para la casita de huéspedes conjuntamente soñada y mejores oportunidades supuestamente para ambas, la secre simple de alma y fea con suerte prototipo de la mexicanita acomplejada Beatriz (Karina Gidi de autocompasión con pasión) pronto se dedica a levantar galanes en una cafetería, primero por accidente, esparcimiento o curiosidad; enseguida por fascinación ante el descubrimiento de sus propias aptitudes y posibilidades amatorias, pues vivía en el ostracismo, sin darse cuenta de su atractivo para con los hombres; luego por sacrificio, ejerciendo sin sordidez una prostitución velada e innombrable a lo Santitos (Springall, 1999), para satisfacer las crecientes demandas monetarias de la emigrante fraterna, y finalmente por inercia o vicio circuloso, hasta que reaparezca el Gran Amor encarnado por el ligue enigmático de las intermitencias y el folclor viajero Carlos (Ari Telch), ese afelpado rondador ronroneante de hipotética personalidad tan arrolladora como su pick-up roja, aunque la hermana explotadora jamás mande por la batracita Beatricita ahora prendada prendida falorreverente gatita mimosa. pág. 180</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Otra cosa que distingue a este crítico es su conocimiento del cine tal cual, los movimientos de cámara, las secuencias, los recursos retóricos, estructurales y literarios, aparte de los históricos e histriónicos, el hombre sabe de lo que está hablando, y por eso, ante producciones tan dispares como son las mexicanas, sus comentarios no tienen otra intención que dar testimonio de lo que ha visto según su propia experiencia de espectador, rara vez aplaude, es cierto, y da la impresión de que todo le desagrada, aún a las cintas que le han provocado placer suele señalarles con precisión sus defectos, sobre Japón de Carlos Reygadas, transcurren preguntas a lo largo del texto:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>¿Incógnita primigenia o evidencias esenciales?... ¿Anécdota mínima o rugosidad reveladora?... ¿Originalidad superficial o recreación profunda?... ¿Instinto de muerte o volencia lastimera?... ¿Aborto suicida o problema relacional?...</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">He llegado a pensar que este hombre no disfruta el cine, sino que lo sufre y lo que hace es compartirnos su dolor, y cómo no ante cintas como <em>Serafín, la película</em> de René Cardona III (2001) <em>Guerrero</em> coescrita y protagonizada por el mismísimo Félix Salgado Macedonio, diputado federal por el PRD y Lina Santos dirigida por Benjamín Escamilla Espinoza (2001), <em>El misterio de la trinidad</em>, de José Luis García Agraz, <em>Inspiración</em> de Angel Mario Huerta Cantú (2001), o <em>Alex Lora, esclavo del rocanrol</em>, Luis Kelly (2002). Estas son las representantes de la grandeza de carencias que sufre el cine mexicano, junto con otras de regular manufactura pero que tienen su grandeza en las pretensiones como <em>Crónica de un desayuno</em> de Benjamín Cann (2000), grandeza de temas abarcados como <em>El crimen del padre Amaro</em> de Carlos Carrera (2002), grandeza en los créditos de producción <em>Y tú mamá también</em> de Alfonso Cuarón (2001), o grandeza en frescura argumentativa <em>Por la libre</em> de Juan Carlos de Llaca (2000). <br />
</div><div style="text-align: justify;">Aunque como lector me resulta frustante no haber visto todas las películas que aborda Ayala Blanco, algunas por accidente o por bondad del videoclub pirata si las he visto, entre ellas <em>Cuento de hadas para dormir cocodrilos</em> de Ignacio Ortiz Cruz (2001) el documental <em>Señorita Extraviada</em> de Lourdes Portillo (1999-2001), <em>Amar te duele</em> de Fernando Sariñana (2002), <em>Perfume de violetas</em> de Maryse Sistach (2000), y <em>De la calle</em> de Gerardo Tort (2001)<br />
</div><div style="text-align: justify;">Triste es haber dejado pasar cintas como <em>Un mundo raro</em> de Armando Casas (2001), de la cual habla muy bien, o saber que <em>Mil nubes de paz cercan el cielo, amor, nunca acabarás de ser amor</em> de Julián Hernández (2003) es inconseguible por estos lados, pero <em>Gabriel Orozco</em>, documental de Juan Carlos Martín la he visto en el saldo de Soriana a 32 varos, junto con <em>Japón</em> de Carlos Reygadas (2001), así que pronto tendré chanza de verlas, sobre el que no guardo ninguna esperanza es el corto <em>Y cómo es él</em> de Issa García-Ascott Ogarrio (1998-2000), que recibe en libro casi todos los halagos posibles:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>…Ejercicio de estilo precozmente dueño de sus recursos expresivos, la ficción correspondiente a la generación del Qué pedo guey se estructura con base en secuencias redondas, brillantes secuencias casi autónomas y con distinto tratamiento, fragmentación, naturaleza y resoluciones internas, cual inagotable repertorio de posibilidades y homenajes posmodernos a los cineastas mundiales-faro más próximos a la sensibilidad juvenil de los últimos años noventa, aunque sosteniendo siempre un elegante y displicente tono general. pág. 211.</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Qué dijo, pues que este corto de 28 minutos, está excelente, y nada más.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Por último, hay que reconocer que el trabajo de Jorge Ayala Blanco se basa en años de vivir y ver el cine, de estudiarlo y de años dedicados a la enseñanza, pero tambien de su conocimiento de la situación social y económica del país, sólo en ese contexto es posible abarcar una obra tan diversa como lo es el cine mexicano, y aunque sus objetivos no se ven claros, este trabajo como los anteriores, son un ejemplo de lo que debe ser la crítica de cualquier disciplina artística en México, esta debe ser una labor diaria, abierta y sincera, no hay otra forma, no hay otra manera, sólo quien intenta verlo todo, entiende y es capaz de apreciar la grandeza cuando esta aparece.<br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-28286442112990009702010-01-20T11:14:00.000-08:002010-01-20T11:14:53.266-08:00<div style="text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S1dV1Fes5vI/AAAAAAAAAE4/2UuVhc_JJbg/s1600-h/YONQUIweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" mt="true" src="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/S1dV1Fes5vI/AAAAAAAAAE4/2UuVhc_JJbg/s320/YONQUIweb.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Yonqui. Willam S Burroughs</span><br />
</div><div style="text-align: center;">Anagrama. 1997<br />
</div><div style="text-align: center;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">Un profundo viaje a las alturas artificiales</span></strong><br />
</div><br />
<br />
<div style="text-align: justify;">Puede sonar exagerado pero esta novela debería ser lectura obligada en las escuelas, y si no ahí, debería serlo entre los funcionarios que apoyan la guerra contra el narco y las instituciones encargadas de la salud en el país. Publicada originalmente en 1953 bajo el nombre de William Lee, sigue siendo tan vigente como en aquellos días. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Pocas son las novelas donde un adicto expone su tránsito por los terregosos caminos de la droga de la manera en que William S. Burroughs lo hizo hace más de 50 años, sin intenciones redentoras y sin el aura mística que comunmente se ve en este tipo de obras, tampoco hace apología de la droga, en pocas palabras, lo que Burroughs dice esque drogarse no es divertido para un adicto, pero le es necesario.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Es fácil entender porqué causó tanto escándalo en esos años, para empezar el adicto no era un personaje ficticio sino el mismo autor, y él no era un miserable sin educación alguna, si no alguien con dinero y una formación académica con todas sus necesidades económicas cubiertas, entonces, ¿porqué este hombre de clase acomodada terminó siendo un adicto?<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>La respuesta es que, normalmente, nadie se propone convertirse en drogadicto. Nadie se despierta una mañana y decide serlo...</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>... Uno se hace adicto a los narcóticos porque carece de motivaciones fuertes que lo lleven en cualquier otra dirección. La droga llena un vacío. Yo empecé por pura curiosidad. Luego empecé a pincharme cada vez que me apetecía. Termine colgado... Nadie decide convertirse en yonqui. Una mañana se levanta sintiéndose mal y se da cuenta de que lo es.</em> <br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Y partiendo de ahí, desde su primer experiencia con la droga, el abuelo William nos cuenta su larga travesía por los mares de la adicción, el largo peregrinar por la ciudad para obtener recetas de morfina, las tediosas esperas y busquedas del camello, su fracaso como distribuidor, el síndrome de abstinencia tan frecuente, su intención de querer dejarlo, los arrestos, los internamientos, las recaídas, el huir de el país. Drogarse nunca fue glamouroso.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Aún así, la novela si tiene una intención didáctica, enseñarles a los demás, a los que no entienden nada del asunto, de qué se trata ser adicto, cómo se vive, qué se hace, a qué se enfrentan cada día. No creo que Burroughs haya buscado originalmente algo de comprensión, para nada, simplemente expone su caso de manera clara y precisa, no hay remordimientos, nada de que arrepentirse, es sólo la narración de un largo viaje de exploración y aprendizaje.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Cuando una persona se engancha, todo lo demás carece de importancia. La vida queda enfocada hacia la droga, un pico y a esperar el siguiente, todo está lleno de “material” y “recetas”, “agujas” y “cuentagotas”. A veces el adicto cree que lleva una vida normal y que la droga es algo accidental. No se da cuenta de que las actividades que no tienen que ver con la droga las realiza como un autómata. Hasta que su fuente de suministro se corta, no se da cuenta de lo que la droga significa para él.</em><br />
</div><em><div style="text-align: justify;"><br />
</div></em><div style="text-align: justify;"><em>“¿Por qué necesita tomar estupefacientes, señor Lee?” es una pregunta que suelen hacer los psiquiatras estúpidos. “Necesito droga para levantarme de la cama por la mañana, para afeitarme y para desayunar. La necesito para seguir vivo” es la respuesta.</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Claro que tanta frialdad sorprende, como debe hacerlo todo relato que contenga el hundimiento de uno mismo, en la dureza de su estilo y en la profundidad de sus simples reflexiones, Burroughs deja todo tal cual es, no hay remordimiento, mucho menos expresa la necesidad de compasión, nos muestra el cuarto sucio sin levantar nada del piso, tal vez esté exagerando (yo no él) pero hasta ahora este es el libro que habla sin miedo de la adicción, no la justifica ni la condena, la concibe como algo que existe en la mente y en el cuerpo, su razonamiento es biológico totalmente, físico en extremo, las celulas que son adictas a la droga siempre estarán pidiendo más, conforme la adicción avanza, las celulas toman el poder, la idea de que los yonquis se reconocen entre ellos se basa en eso, las celulas adictas reconocen las de otros, entre ellos hay algo que los une y que va más allá de la simple superficie.<br />
</div><div style="text-align: justify;">El relato de su estadía en México también es directo, este país está enfermo, todos trafican con algo, pocos son los que obtienen el poder, sin más remedio Burroughs se refugia en el alcohol, ya no sabe que es peor, embriagarse para soportar el día o insistir en buscar la dosis, prueba el peyote, el tequila, sigue buscando, cuando se va de México lo hace con la intención de encontrar la mítica ayahuasca o yage, toda su mente flota con optimismo<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Colocarse es ver las cosas desde un ángulo especial. Es la liberación momentánea de las exigencias de la carne temerosa, asustada, envejecida, picajosa. Tal vez encuentre en el yage lo que he estado buscando en la heroína, la hierba y la coca. Tal vez encuentre el colocón definitivo</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">No sé si logró encontrarlo, pero sé que algo encontró, y a su manera, en sus novelas siguientes trató de compartirlo, hay que admitirlo Burroughs no es para todos.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-24569308964788217542009-12-29T08:35:00.000-08:002009-12-29T08:40:49.949-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SzoudEl95aI/AAAAAAAAAEw/2nKQeufD9gY/s1600-h/lector.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ps="true" src="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SzoudEl95aI/AAAAAAAAAEw/2nKQeufD9gY/s320/lector.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>La triste historia del candido lector </strong></span><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>y el escritor desalmado… y viceversa</strong></span><br />
<span style="font-family: Georgia, "Times New Roman", serif;"><em>(Primera Parte)</em></span><br />
</div><br />
Como lector me gusta pensar que hay libros que no están hechos para mí, como escritor prefiero creer que hay lectores que no están hechos para mis libros, end of story?<br />
<div style="text-align: justify;">Pues no, como lector pienso muchas cosas, los años y los daños me han convertido en alguien que busca el placer de encontrar relámpagos y espejos que los multipliquen, prefiero los libros donde encuentro mis fantasmas y no aquellos que me muestran un cádaver bastante conocido: el escritor que juega o intenta jugar con el lector, considero entonces que si alguien tiene un juguete en la mano ese es el lector, el escritor debió por obligación divertirse mientras escribía el libro, si no lo hizo, ese es su problema, no el mío.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Tambien creo que si el escritor no le da al lector algo de que asirse, el libro se le caerá de las manos, por desgracia hay lectores que se obligan a encontrar algo que no existe, estos son los que sufren decepción tras decepción, pero son incapaces de enterrar el orgullo adolescente de leer los libros hasta la última página. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Luego está el final, algunos lectores son capaces de decir que lo mejor de ese libro fue precisamente eso, el final, ante la simpleza del comentario, yo respondo igual “y porqué no lo escribió al principio”.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Sobre los escritores, tambien tengo ideas muy simples: en la pretensión está la penitencia. Hay algunos que se han propuesto escribir algo que supere el Ulises de Joyce, la tiene fácil, agreguele dos palabras o dos páginas más, si es que puede. <br />
</div><div style="text-align: justify;">El lector es más práctico, si quiere leer algo que lo divierta tanto como la autobiografía de Groucho Marx (Groucho y yo) va y toma la autobiografía de Groucho Marx y no la de otra persona, si yo quiero reírme triste y mexicanamente como sólo Ibarguengoitia me hace reir, pues agarro un libro de él y ya, sólo a un imbécil se le ocurre ponerse a esperar el nuevo Cien Años de Soledad, con otro título y escrito por otro autor, chale.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Claro que considero al lector el más noble de los dos, ahí estan los que juran que no hay libro malo, que en todos hay algo, casi les doy la razón, hay libros que son tan malos que todas sus deficiencias me parece que fueron hechas a propósito, esa capacidad para reunir tantos errores sólo puede ser obra de alguien que sabe lo que está haciendo, de otra forma no se pueden explicar que los publiquen, aquí es donde entra la famosa y tan temida “intención” pero de echar a perder una historia, un montón de personajes y a los pocos lectores que todavía andan por ahí.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Cuando escribo no pienso demasiado, creo que eso se nota, cuando era joven tenía la idea de que los poemas debían ser sumergibles, pero mi pequeña idea estaba a la mitad, Cesar Silva me la completó, los submarinos absorben agua para poder hundirse, por lo tanto, uno debe absorber lectores (aunque prefiero lectoras, of course) sumergirse entonces, implica tener algo de ellos, de los otros, algo que nos permita hundirnos, desaparecer de la superficie y llegar hasta donde seamos capaces, es decir, que el hundimiento, la sumersión en sí, dependerá de qué tanto hayamos absorbido del otro en nuestra obra. Aún creo en esta idea, si es que puede llamársele de esa manera.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Y creo en ella, porque lo que leo ahora parece ocuparse de la superficie solamente, sus libros son incapaces de dejarse ir/hundir en uno, no tienen nada de mi, pero tampoco de nadie, de ningún otro, ya lo dijo Porchia “un hombre solo, es demasiado para un hombre solo” y tiene razón, un escritor que escribe de y para si mismo, muy bien puede mandar a imprimir un ejemplar y quedarse con el, o imprimir varios para los demás que escriben como él.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Que el lector de hoy es un verdadero infame que busca satisfacciones inmediatas, es probable, pero no creo que toda la culpa sea de él, las editoriales y su ejército de narcisos han hecho lo suyo, por un lado acaparando la mesa de novedades, de hecho, al crear esa mesa han destruído el afán del lector por descubrirlas él mismo. las editoriales aceleran el proceso de envejecimiento de los libros, y no dejan respirar ni al libro ni al lector, ese apetito por lo nuevo ha generado una nueva legión de lectores voraces, ávidos de mercancía desechable, librito de avión o de temporada, incluso de... válgame dios, de moda! así las cosas. Saramago decía que en esto de escribir “no había que tener prisa, pero tampoco perder el tiempo” creo que eso tambien se aplica al acto de leer. Yo cuando quiero leer algo nuevo, algo que me sorprenda, agarro siempre Gargantua y Pantagruel de Rabelais, nunca me ha decepcionado.<br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-46022753696788580422009-12-16T09:28:00.000-08:002009-12-16T09:29:29.288-08:00<div style="text-align: justify;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SykXf3j6BSI/AAAAAAAAAEg/Wm2kkFpaokQ/s1600-h/Nuevasweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" ps="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SykXf3j6BSI/AAAAAAAAAEg/Wm2kkFpaokQ/s320/Nuevasweb.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Nuevas líneas de investigación: </span><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">21 relatos sobre la impunidad</span><br />
</div><div style="text-align: center;">Biblioteca Era, 2003<br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
<span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Ay Nanita! Cuánta impunidad… literaria y editorial</strong></span><br />
</div><div style="text-align: justify;">Hace seis años pocos hubieran pensado que este país podría estar peor, nadie se imaginaba que el Estado zombi que intentaba perpetuar Vicente Fox, iba a ser sacudido por el estado militar, hace seis años la impunidad era un cuento de horror, ahora, ahora estamos en las mismas.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Al ver la portada de este libro esperaba encontrarme algunas sorpresas, no salí decepcionado, me sorprendió mi ingenuidad. Así en breve, les digo que este libro es un vil asalto en despoblado, no lo compré, pero bien que me despojó de algunas horas que muy bien pude haber aprovechado en hacer otra cosa.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Nuevas Líneas de Investigación práctica lo que aborrece, su contraportada es una mentira, una burla mal intencionada, para empezar no todos son relatos y no todos los autores siguieron las reglas: <em>“ahondar en el rumor, la imaginación o las sospechas desdeñadas por la versión oficial”,</em> sólo nueve de los veintiún relatos fueron escritos para este libro, es decir, menos de la mitad, y de esos se agradecen <em>“El error de la memoria”</em> de David Toscana, <em>“Sembrado”,</em> un brillante relato de Francisco Hinojosa quien sabe que para estos temas la farsa, no es el recurso más honesto, sino el único, <em>“Los democráticos”</em> de Mario Bellatín es un cuento breve pero ingeniosamente cruel, <em>“El hombre vendado”</em> de Juan Ríos narra al estilo de la novela negra la supuesta muerte del señor de los cielos durante una cirugía, e <em>“Isidore”</em> de Juan José Rodríguez, nos cuenta con precisión algo cercano al turismo criminal.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Lo demás es una selección de textos diversos que forman parte de los libros de sus respectivos autores o que han sido publicados en revistas o periódicos, la mezcla es tan exótica que lo mismo cabe un ensayo sobre el dedazo en el PRI de Carlos Monsivaís, que el comunicado del Ejercito Zapatista sobre el crimen de Acteal, ambos de bastante utilidad para fines históricos, y si de historias se trata, la de Jesus Malverde, el santo de los narcos narrada por Daniel Sada es bastante interesante y fue publicada en Letras Libres, tambien aparece Hugo Hiriart con una excelente crónica electoral, a la que por cierto no le encontré la impunidad por ningún lado, hay un fragmento del libro que Sergio González Rodríguez escribio sobre los crimenes de mujeres en Ciudad Juárez “Huesos en el desierto” , el vertiginoso relato de Federico Campbell “Tijuana bajo la niebla” tambien vale la pena y el breve texto de Sergio Pitol sacado de <em>El arte de la fuga</em>, curiosamente resulta ser el más oscuro de todos.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Ahora que si de impunidad literaria hablamos, “El crimen de Oventic” de Jorge Volpi es una deplorable mezcla de crónica reportaje y cuento que no dudo en bautizar como “el reporcronicruento” :<br />
<em>"Afirmar que las condiciones de vida en este pueblo son inhumanas supondría emplear un tibio eufemismo… "</em><br />
</div><div style="text-align: justify;">Y esa es la primera línea, y por si eso fuera poco, es el texto más largo, 26 páginas con todos los vicios de todos los géneros con los que se puso a jugar, creo que es un trabajo ejemplar para enseñarle tanto a los escritores como a los periodistas todo lo que NO deben de hacer. Algo bueno tenía que tener.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Otra situación que me molestó en algunos textos es la obviedad con la que evitan nombrar a las personas que habitan sus relatos, creo que precisamente en eso consiste la impunidad: en evitar nombrar a los responsables, en no señalar con seguridad a los delincuentes, en esconder, ocultar las pistas, hacerse pato simplemente, y ahí es donde empiezan las dudas, ¿fue esa la regla no escrita para colaborar en ese libro?, ¿o se les dio libertad a los autores para no hacer uso de ella? ¿Será esa la razón de tan pocos relatos inéditos en el libro? ¿Si así fue, porque no le pusieron 22 relatos sobre la impunidad? El relato 22 es el que lector escribiría al terminar el libro. Si es que lo termina!<br />
</div><div align="justify"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-31757340238929352602009-12-04T11:16:00.000-08:002009-12-04T11:16:45.461-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Sxlfaw088gI/AAAAAAAAAEY/CdWMT_ZuiUo/s1600-h/culpableweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" er="true" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Sxlfaw088gI/AAAAAAAAAEY/CdWMT_ZuiUo/s320/culpableweb.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Culpable de Nada.</span> Julio Pesina<br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;">Fondo Editorial Tierra Adentro 2008<br />
</div><div style="text-align: center;"><strong><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El cuerpo: el efimero cementerio de nuestras cicatrices</span></strong><br />
</div><br />
Con sólo tres personajes y la relación que tienen con sus propios cuerpos, Julio Pesina ha construído una novela que al igual que un triángulo, puede leerse desde varias perspectivas y ofrecernos una figura distinta cada vez que lo hacemos, siguiendo con aquella regla de que “lo profundo debe esconderse en la superficie”, Pesina explora las manifestaciones físicas ante el deseo, la pérdida o la malformación: Aldo es un metrosexual, Ogla una mujer cuyo amante murió en un accidente de auto y Maria Gloria una enana que ha encontrado en el viejo oficio de la prostitución todo lo que anhela.<br />
<div style="text-align: justify;">Ogla suple el vacío con un consolador metálico de última generación, Aldo no abandona su rutina de ejercicios y su admiración por Mozart, Maria Gloria sólo sabe que nació para dar amor. Los tres tratan de olvidar el pasado por sus propios medios, borrarse la culpa, enterrar el remordimiento. Aldo y María Gloria sí tienen algo en común, su pasado en el mismo pueblo, la misma escuela primaria, el mismo profesor Dix que los dejó marcados, marcas, precisamente eso es lo que menos desea Aldo en su cuerpo, sus cicatrices están en otro lado, ocultas, a la espera de que la memoria de nuevo las haga visibles, nuevamente dolorosas.<br />
</div><div style="text-align: justify;">En Aldo se cumple la condena de quien rinde culto al cuerpo, la molestia que le causa la imperfección anatómica, termina acumulándose en lo emocional y de la insatisfacción pasa a la imperfección, a esa necesidad de inventarse otro cuerpo a partir de lo poco que tiene, al no poder desprenderse de él, se obliga a reconstruir la ruina en la que nació, su constancia y entrega la dedica a reparar la desvencijada barca que la naturaleza le ha dado.<br />
</div><div style="text-align: justify;">En cuánto a Ogla, hay otro tipo de rechazo, ella desprecia el cuerpo ajeno, ante la gris experiencia que le dejó su amante: hombre casado que muere junto a “otra” amante, prefiere hacer uso de un artefacto y una fotografía para asegurarse de la lealtad y disposición del ahora sí, único y fiel objeto de su afectos.<br />
</div><div style="text-align: justify;">De los tres María Gloria, “Mayoya” es la más consciente de lo que posee, la que menos cuerpo tiene de los tres, es la que mayor provecho le ha sacado, su limitación le es ajena, su estatura es algo que perciben los otros, no ella, la niña enana que era humillada frente a todos por el profesor Dix, la nueva alumna que defecó en el patio durante el festival escolar, ahora es una mujer que se sabe dueña de si misma, tiene poco pero le pertenece todo.<br />
</div><div style="text-align: justify;">La noche y la ciudad serán entonces sitio propicio para los encuentros, Aldo y Mayoya se ven de nuevo en un antro de mala muerte, Ogla un día decide visitar al joven Aldo que vive frente a ella, Aldo siente que Mayoya puede ser todo lo que necesita, Mayoya no piensa igual, al final la lluvia y el destino hará lo único que sabe hacer, acomodar las piezas y guardar en el cajón las más pequeñas.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Culpable de Nada es una historia donde el pasado y el remordimiento van devorando el presente de sus personajes, el entorno en el que se mueven los pondrá de nuevo en la realidad innegable: todos tenemos un cuerpo que envejece, todos perdemos algo de él en cada día que transcurre, algo en él se muere a cada instante, y sin embargo, son las humillaciones que sufre el cuerpo las que se quedan como cicatrices en la profunda y extensa piel de nuestra memoria.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-18116418781024296092009-12-03T12:36:00.000-08:002009-12-03T12:36:46.583-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SxggV58iFYI/AAAAAAAAAEQ/oiAylhTcy-M/s1600-h/enelcieloweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" er="true" src="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SxggV58iFYI/AAAAAAAAAEQ/oiAylhTcy-M/s320/enelcieloweb.jpg" /></a><span style="font-size: large;"></span><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: large;">En el Cielo con Diamantes.</span> Senel Paz<br />
</div><div style="text-align: center;">Ed. Bruguera…2007<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #cc0000; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Las hormonas de la Revolución</strong></span><br />
</div><br />
La primera vez que ví el nombre de Senel Paz, fue durante la proyección de la cinta cubana <em>“Fresa y Chocolate”,</em> dirigida por Tomás Gutierrez Alea en 1994 y cuyo guíon esta basado en el cuento <em>“El lobo, el bosque y el hombre nuevo”</em> con el que este autor cubano obtuvo el premio internacional de cuento Juan Rulfo en 1990.<br />
<div style="text-align: justify;">Quien no haya visto la película o leído el cuento, le recomiendo que lo haga, la historia de David y Diego es sobre esas amistades todo terreno que cada vez escasean más entre los jóvenes. Aparte, En el cielo con diamantes es la historia de David antes de conocer a Diego. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Contada con un estilo que sólo atino a calificar de trópical, esta novela narra los primeros años de la revolución cubana a traves de los ojos de dos adolescentes, David, el niño melancólico y Arnaldo, un recipiente lleno de hormonas a punto de estallar. Los dos son de Las Villas, un pequeño pueblo de Cuba al que poco a poco le van llegando los avances de la revolución. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Senel Paz hace una serie de montajes precisos: la familia de David la conforman dos hermanas, su madre soltera y su abuela, cuatro mujeres que sólo tienen algo en común, y eso es la esperanza de que David se convierta en un hombre de provecho, la abuela es una ferviente católica, las hermanas son parte de la juventud, revolucionaria y su madre a decir de todos los hombres del pueblo, está que se cae de buena, lástima que tenga por madre a esa vieja urraca.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Por el otro lado, la familia de Arnaldo es otro tipo de circo, su padre es el amante de la hermana de su propia esposa, es decir la tia de Arnaldo, y este a su vez termina siendo el amante de su tía, la tarde en que su padre los descubre, este comienza a enfermar y muere después de un tiempo.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Los dos obtienen una beca para estudiar en La Habana, gracias a los triunfos de la revolución los hijos de los campesinos pueden seguir estudiando, a David los vecinos lo despiden en la estación del tren y hasta le dan algo de dinero, Arnaldo va por su lado, pero con la intención de mantener esa amistad para siempre. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Si no es por el humor que desborda en casi todas sus páginas, esta novela sería una aburrida historia de engaños y esperanzas, o una simple <em>disneylización</em> del pasado como decía José Emilio Pacheco al referirse a la nostalgia, sin embargo, la formula de Senel Paz al principio resulta efectiva, quienes narran son David y Arnaldo, cada capítulo se van alternando la historia de David, porque esta es la historia de David confiesa Arnaldo desde el principio. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Así, lo que en David es una reflexión ingenua, en Arnaldo es trópico puro, mientras David espera el primer amor, Arnaldo ya ha cargado hasta con las chivas del pueblo, mientras David sigue con sus ojos pegados a los libros, Arnaldo no aleja sus manos de las muchachas, mientras David lee los libros que la maestra de literatura y la revolución le permiten, Arnaldo y los otros leen en secreto el capítulo erótico de Paradiso, la novela de José Lezama Lima, así cada quien por su lado van acercando a David con esa mujer con la que debe perder su virginidad.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Por que también, esta es la historia de la virginidad de David, un día al joven Arnaldo se le aparece la Vírgen de la Caridad y le dice que debe ayudar a su amigo, pues si este no pierde su virginidad antes de los 17 años el pobre morirá de melancolía, por esta razón insiste en sus esfuerzos por sacar a David del internado los fines de semana pero sin éxito.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Por desgracia la formula se agota pronto, David sueña con ser escritor, sueña con ser alguien distinto en cuanto sus pies toquen el suelo habanero, y no deja de soñar, su imaginación vuela y vuela y las páginas pasan y pasan y no pasa nada, Arnaldo a pesar de ser más divertido y dinámico en sus narraciones, tambien da muchos rodeos, Senel Paz lo justifica insistiendo en que Arnaldo no es un escritor, y por lo tanto, no tiene la habilidad para hilar las historias de manera ordenada, total que los dos no dan para más, bueno los tres: Senel, Arnaldo y David y la novela comienza a despeñarse en la página 200 (es de 424) sólo aquel lector que le interese ver Cuba desde los ojos de un cubano podrá insistir en terminar con la novela. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Senel Paz se queda a la mitad de muchas cosas, entre la crónica de esos días llenos de esperanza, y la historia de un primer amor sin gracia, entre que nos invita a pasear por una joven Habana llena de internos con los penes duros, dispuestos a levantarse cualquier jeba que se les atraviese, igual nos obliga a quedarnos con el aburrido de David, con sus libros y las cuatro paredes de su habitación en el internado. Mientras Arnaldo y compañía escuchan por primera vez el Sargent Pepper de Los Beatles encerrados y en secreto, David piensa en su padre que sólo ha visto una vez,y casi al final aparece Vivian y la noche prometida, la esperada por todos, y después nada, si se animan a leerla, olvidénse de David desde el principio, todas las historias que lo rodean son mejores, incluso la manera en que terminan. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Porque al final de la historia de David, Senel Paz decide hacerse un autohomenaje bastante incomodo, la novela termina exactamente donde el cuento <em>“El lobo, el bosque y el hombre nuevo”</em> comienza: Mientras David come un helado en el Coppelia, un marica se le acerca con la intención de sacarle plática. Coño!<br />
</div><div style="text-align: justify;">Tal vez como alegoría de la revolución cubana pueda funcionar: <em>En el cielo con diamantes</em> es una novela muy larga que termina donde inicia un cuento que algunos ya conocemos. <br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-64614856087846706442009-11-25T10:01:00.000-08:002009-11-25T10:02:16.465-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Sw1vr1A7jlI/AAAAAAAAAEI/SnFsKLNDd6I/s1600/lapresaweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://2.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Sw1vr1A7jlI/AAAAAAAAAEI/SnFsKLNDd6I/s320/lapresaweb.jpg" yr="true" /></a><span style="font-size: large;"></span><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: large;">La presa.</span> Kenzaburo Oé<br />
</div><div style="text-align: center;">Anagrama. 1994<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Retrato de infancia con guerra al fondo</strong></span><br />
</div><br />
<div style="text-align: justify;">Hubo un tiempo en que la crueldad y la violencia sólo existían en la distancia, llegaban a los oídos de los niños en forma de historias asombrosas, las batallas y los enfrentamientos habitaban la imaginación de los infantes y si acaso tenían una señal visible de la guerra, esta era la suspensión de clases, el verano perpetuo, las vacaciones sin fin. Hubo entonces lugares donde la guerra jamás sucedió, sitios donde la sangre no ensució las ropas ni las tierras de nadie, la pequeña aldea donde sucede la breve pero inmensa novela de Kenzaburo Oé, tristemente, no es uno de ellos. <br />
</div><div style="text-align: justify;">La tensa tranquilidad de una aldea de cazadores se ve perturbada por la caída de un avión enemigo, de dicho accidente sólo hay un sobreviviente, un negro que será hecho prisionero y que por dicha condición es encerrado en el almacén de la casa donde vive su personaje principal, un niño sin edad precisa que nos narra esta historia.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Pero de repente el soldado estiró el brazo –un brazo increiblemente largo-, alzó entre sus gruesos dedos, cuyas falanges estaban erizadas de pelos, la botella de ancho gollete, se la acercó y la olió. Después la inclinó, abrió sus labios como de caucho, descubrió dos perfectas hileras de dientes fuertes y deslumbrantes, cada uno en su sitio exacto igual que las piezas de una máquina, y vi como la leche caía en las profundidades rosadas y relucientes de su amplía garganta. La nuez del negro cloqueaba como un desagüe cuando chocan en él el agua y el aire. Por las dos comisuras de la boca, que daba la penosa sensación de ser una fruta demasiado madura estrangulada por un cordel, la leche grasienta se desbordaba, bajaba a lo largo del cuello, mojaba la camisa abierta, caía por el pecho y se inmovilizaba en la piel pegajosa con reflejos oscuros en forma de gotas viscosas como la resina que temblequeaban. Descubrí, en medio de la emoción que me resecaba los labios, que la leche de cabra era un líquido extraordinariamente hermoso.</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Antes de eso la guerra sólo había sacudido las rutinas del verano, ante la imposibilidad de llegar a la ciudad, ahora la aldea tiene su propio crematorio, los niños pasan más tiempo en la playa, observan el ir y venir de los adultos, y se adaptan al ritmo de los días sin escuela y sin obligaciones, todo está bien hasta que sucede el accidente, la aldea no volverá a ser la misma para nadie después de eso, el negro, la presa, lo cambiará todo, absolutamente todo.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>Ya no formaba parte de la comunidad infantil: ésta era la idea, surgida como una revelación, que ahora me invadía. Las sangrientas batallas con Morro de Liebre, la caza de pajaritos en las noches de luna, los descensos en trineo, los cachorros salvajes, todo eso era bueno para los niños. Pero esa clase de relaciones con el mundo ya no tenía nada que ver conmigo.</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">La narrativa de Oé es sensual en todos los aspectos, habla de texturas, calores, humedades, aromas, sabores, reacciones epidérmicas, sus descripciones son tan coloridas y llenas de una extraña calidez, que en ellas no sólo encontramos una ennumeración de datos esenciales para visualizar los sitios y las condiciones de la aldea, es a travez de estas minuciosas observaciones llenas de vida que entendemos la diferencia que provoca la llegada de este extraño, lo ajeno que es a este sitio, y como poco a poco, cuando todos creen que no es peligroso, el negro se va adhiriendo al paisaje, como los habitos del encierro lo van volviendo parte de lo que antes lo rechazaba, y en forma de agradecimiento repara algunas herramientas y artefactos de los aldeanos, empezando por la trampa para jabalíes con que lo mantienen quieto, ese es el gesto adecuado para demostrar que no quiere huir.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Sin embargo, la misma presa sabe que no lo puede ser por siempre, por eso cuando sospecha que la situación, su situación, está por cambiar, no tiene otra opción que volver a ser el enemigo, hace rehén al niño que nos narra esta historia y el desenlace con muerte y víctima es inevitable.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>-Cuando una guerra llega a ese punto, es el colmo – dijo Chupatintas- ¡Mira que aplastar los dedos de un niño…!-</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><em>No contesté nada y sentí que me faltaba la respiración. Era muy probable que la guerra, aquella interminable y sangrienta batalla de gigantescas dimensiones, aquella especie de maremoto que, en unos países lejanos, se llevaba los rebaños de corderos y arrasaba la hierba recién segada, siguiera prolongándose. Pero ¿quién hubiera imaginado jamás que aquella guerra tuviera que llegar hasta nuestras aldea? Sin embargo, lo había hecho, para destrozar mi mano y mis dedos, para emborrachar a mi padre y llevarlo a blandir su podadera. Así, de golpe nuestra aldea se veía envuelta en la guerra; y yo, en medio de aquel tumulto, ya no podía respirar.</em><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Si cuando fue hecho rehén el personaje de Oé, se sintió traicionado, luego cuando se descubre convertido en “presa” tambien, escucha que algo ya había comenzado a romperse, a crujir desde las profundidades de la circunstancia, los tambores de la guerra se estaba acercando y por fin retumbaron en su pequeño cuerpo.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Muere entonces la infancia de nuestro personaje, pero ambos, la presa y el niño son arrancados de sus paraísos por culpa del miedo y el odio que siempre surgen imbatibles cuando la vida está en peligro. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Ahí terminas sólos, el cádaver y el niño herido, mientras los demás juegan, él percibe el pesado olor de la muerte y en su mano los rastros de la furia. Los tambores siguen sonando en su cabeza.<br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-26122551373338412282009-11-20T11:36:00.000-08:002009-11-20T11:36:05.357-08:00<div style="text-align: justify;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Swbu8YROgXI/AAAAAAAAAEA/7o3KE-27Btc/s1600/outofweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://4.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Swbu8YROgXI/AAAAAAAAAEA/7o3KE-27Btc/s320/outofweb.jpg" yr="true" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Los Discos del Ataúd</strong></span><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Out of Time.</span> REM<br />
</div><div style="text-align: center;">Warner Music, 1991<br />
</div><div style="text-align: justify;">Si alguien me hubiera preguntado aquel verano del 91 sobre el cuarteto de Atenas, Georgia, yo hubiera respondido con mi soberbia ignorancia que Atenas está en Grecia y que la música griega por el momento no estaba en mis planes, en esos días mis dedos le daban la vuelta una y otra vez al cassette Mujeres de Silvio Rodríguez y cursaba el quinto semestre de la preparatoria.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Y se le hubieran preguntado por REM a mi amistosa sombra Raúl Quezada, el habría hablado largo y tendido sobre la etapa alfa del sueño en los humanos y el característico movimiento ocular que aparece casi a punto de despertar.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Pero uno de los tantos sábados que yo pasaba frente al televisor sucedió lo inesperado, aparece un tipo corriendo, un jarrón con agua se estrella en el suelo y comienza una música sencilla, luego aparece un tipo flaco demostrándonos sus naturales deficiencias para el baile y cantando que ha perdido su religión, todo esto acompañado de imágenes muy extrañas, un ángel anciano que cae del cielo, unas muchachas con ropas orientales y un San Sebastián sin flechas en el cuerpo pero atado en un árbol, esperándolas.<br />
</div><div style="text-align: justify;">El lunes los precoces Monjes Morados no hablamos de otra cosa “ ¿vieron este video raro de un grupo que se llama REM? Todos coincidimos en la respuesta. Mi tocayo “el Soju” en ese momento se impuso una sola misión en su vida, conseguir ese disco y en menos de una semana lo hizo, no sólo eso, tambien compró un VHS con todos los videos y para nosotros la música ya no fue lo mismo, estabamos inmersos en el universo visual de Michael Stipe y compañía. Para mí el video de “Low” fue algo impresionante, un pintura que se mueve con lentitud a lo largo de una canción lenta y tristísima, y de las canciones “Country Feedback” sigue siendo mi favorita, el disco en sí, es como un álbum de fotografías de tu vida hasta el fin de la juventud, canciones que contienen todo lo que ya fue: el amor, los adioses, las oportunidades y el imperceptible milagros de haber salido vivo de ahí, de esos lugares y de esos momentos. Canciones que nombraban un futuro que para nosotros era aún lejano pero al igual que la advertencia de los espejos retrovisores, estaba más cerca de lo que pensábamos. <br />
</div><div style="text-align: justify;">A esa caja extraña llena de objetos tambien extraños le pusieron Out of Time, según dijeron alguna vez, el título se los dio una secretaria de la compañía disquera, le habían dicho que el disco trataba de “pérdida, amor y melancolía”, tal vez en eso días para nosotros se trataba de todo lo contrario, encuentros, desamor y apego al presente, hoy que lo escucho, 18 años después, creo que tenían razón.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Al poner ese disco aparece de inmediato esa parte del jardín que habitamos casi un año en la preparatoria Hermanos Escobar,aunque para nosotros los verdaderos hermanos de la prepa eran los Nava, Pilar y Eleazar una especie de siameses mágicos y poderosos, Soju era un terrible infante con la mirada puesta en la eternidad, y el querido Juancho Remix un joven de DJ que aterrizó como un meteoro desde Ensenada, de vez en cuando nos traía una de sus mezclas caseras que él mismo había confeccionado con Depeche Mode, The Cure y Morrisey, compartíamos los cigarros y las mañanas, conversabamos de nada y planeabamos cualquier cosa con tal de extender el día hasta donde nos fuera posible, nos unía el rechazo a las formas y las costumbres, nos considerabamos únicos en una preparatoria donde la individualidad no sólo era permitida sino promovida a cada instante, eramos otro grupo nada más, pero eramos el grupo que traía una grabadora (la de Sojú) con reproductor de CD, no habitabamos los salones de clase salvo lo necesario, nos gustaba la calle, los espacios abiertos, el no tener horarios, lo nuestro era el andar tomando fotografías, dibujando o tratando de aprendernos una canción de Caifanes en la guitarra, eramos un quinteto de solitarios sin remedio buscando alguna manera de asir el tiempo. Y ese año, ese disco de REM creo, nos facilitó un poco el trabajo.<br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-15320240206189237412009-11-12T10:33:00.000-08:002009-11-12T10:33:45.507-08:00<div style="text-align: justify;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SvxUZTJFeLI/AAAAAAAAAD4/yIuvAmx2H8A/s1600-h/tesoroweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" sr="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SvxUZTJFeLI/AAAAAAAAAD4/yIuvAmx2H8A/s320/tesoroweb.jpg" /></a><span style="font-size: large;"></span><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><span style="font-size: large;">El Tesoro de la Sombra.</span> Alejandro Jodorowsky<br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;">Siruela/De Bolsillo. 2007<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #7f6000; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>El retorno al origen (y las intenciones) del cuento</strong></span><br />
</div><div style="text-align: justify;">Mi primer acercamiento a la obra de Alejandro Jodorowsky fue desastroso, el profesor de historia del arte nos presentó “La montaña mágica” como una obra maestra y para mi no fue otra cosa que una misa extraña de una religión desconocida con duración de tres horas y que por fortuna no tenía la obligación de verla en su totalidad, así que me salí a los treinta minutos, cuando comienzan a explotar los sapos.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Años después adquirí la “Antología Pánica” que publicó Joaquín Mortiz y que en un principio me pareció infumable, el ego de Jodorowsky en esos tiempos estaba más allá del cielo y sólo acudía a él cuando necesitaba algo que me sacara de quicio. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Poco a poco y ante la necesidad de encontrar una creencia religiosa menos pasiva y que no consistiera en un Dios que habita los cielos rascándose su panza infinita por los siglos de los siglos (imagino que cuando termine de rascarcela se acabará el mundo), volví entonces con más calma a Jodorowsky y a su mezcla de doctrinas orientales, las cuales siempre me han parecido más propositivas que las religiónes de origen cristiano.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Y si en algo destacan este conjunto de creencias es en la importancia del aprendizaje y la reflexión, desde hace miles de años los orientales encontraron en la fábula un método de enseñanza preciso que requiere atención y razonamiento, las cuales no son muy comunes en el ser humano, por lo tanto, estaban obligados a que las historias fueran atractivas y breves, como una explosión o una descarga eléctrica, si algo me ha gustado siempre de estas brevisimas narraciones, es que al contrario de la fábula europea que se vio en la necesidad de no ofender a nadie y usar animales para lograr sus propósitos didácticos, en oriente a todas las cosas se les llama por su nombre, lo cual considero es el principio universal de la honestidad, nombrar las cosas es adueñarse de ellas pero tambien es entenderlas, verlas como son. Asi que en estas historias los viejos son viejos, el panadero hace pan y el monje perezoso es un monje perezoso.<br />
</div><div style="text-align: justify;">El tesoro de la sombra es la reunión de dos libros y casi doscientas historias breves, la mayoría brevisimas y no todas son de carácter didáctico, no en apariencia, pero la mayoría de ellas invitan a la reflexión y van más allá del simple acto de contar una historia.<br />
</div><div style="text-align: justify;">La mayoría son fábulas conocidas, algunas son retomadas con ligeros cambios y otras sí son creación de Jodorowsky, esto se nota porque son las más extremas: madres que devoran a sus hijos, gente que se queda sin piel, escenarios apocalípticos, historias de muerte y destrucción, y tambien son un poco extensas en comparación con las demás, aparte en ellas se nota la mezcla de varías doctrinas, deidades y creencias, pero sobre todo su peculiar sentido del humor:<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><span style="color: #073763;">Santa Madre de Dios, cúrame a este niño. Anda siempre por el aire, nunca quiere tocar tierra. Flota en la casa como un globo, lo que es molesto para las visitas porque en cualquier momento puede orinarles el sombrero o mancharles la ropa con algo peor. Hace milagros idiotas: multiplica las arañas y las ratas. Además huele a rayos porque es imposible bañarlo: no quiere entrar en el agua e insiste en quedarse de pie sobre su superficie. Ayer volvió a la vida a un pollo asado. Sin plumas ni cabeza, ahora anda por ahí tropezando entre los muebles, perseguido por los gatos. ¡Hazlo normal, Virgen adorada, para que ya no le devuelva la vista a tanto hombre lúbrico! Esos que fueron ciegos pegan sus nuevos ojos saltones a los vidrios de mi ventana, dándose placeres manuales cuando en la noche me quito las enaguas. También al quejarnos de la sequía, nos hizo llover sobre las salinas. Y lo que es peor, Madre Inmaculada, durante la comunión convirtio las hostias en chorizos paara que alimentaran a los patipelados. ¡Por favor cúralo, Virvencita buena, limpiámelo del virus de la santidad!</span><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">El Tesoro de la sombra es un libro para los que disfrutan las historias cortas, pero tambien para quienes prefieren reflexionar sobre los actos ahí narrados, para quienes están aburridos de escuchar los mismos consejos baratos de autosuperación, aquí pueden encontrar el verdadero origen y razón de lo que ahora se ha convertido en vil patrañas en manos de charlatantes o para decirlo de otra forma, este libro es para los que prefieren comer un pescado entero en vez de uno enlatado, si lo que les urge es la novedad, despierten, tal cosa no existe. Pero si lo que quieren es tener algo de valor bajo la sombra de su cráneo, este libro puede ser un buen principio, un comienzo.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-4114991214541194252009-11-06T08:15:00.000-08:002009-11-06T08:15:11.301-08:00<div style="text-align: justify;"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SvRKtSChhkI/AAAAAAAAADw/WQa7XgliA1k/s1600-h/Distric9web.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" sr="true" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SvRKtSChhkI/AAAAAAAAADw/WQa7XgliA1k/s320/Distric9web.jpg" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Distrito 9</span>. <em>Dir. Neill Blomkamp</em><br />
</div><div style="text-align: center;">TriStar Pictures, 2009<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="background-color: white; color: #cc0000; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Postales desde el No Futuro</strong></span><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">En menos de diez minutos esta cinta logró algo peculiar, despertar en mi la empatía por una situación de ficción donde el extraterrestre es rechazado por todos, desde ese momento sabemos que será desplazado a vivir en otro sitio peor al que se le tiene confinado ahora, según el vertiginoso prologo mezcla de documental, reportaje y grabación gubernamental, esto es lo más humanitario posible que pueden hacer por estos “crustaceos” caidos del cielo, pues los mismos habitantes de Johannesburgo en Sudáfrica estan hastiados de la presencia de estos extraterestres inferiores.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Dicha empatía no me habría surgido si el trato que reciben estos “extranjeros” en “desgracia” no fuera similar al que algunos “sectores” de la humanidad sufren en nuestros días, los Palestinos por dar un ejemplo, y las expresiones de rechazo de los habitantes que tiene que vivir con estas despreciables criaturas, tambien se parecen un poco a las que se hacen en ciertos paises, Estados Unidos por nombrar alguno, contra su invencible plaga invasora: los mexicanos. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Para fortuna de todos y desgracia mía, esta cinta no va por ahí, sino por algo peor y que termina mal: El joven Wikus es un burocrata que recibe un gran favor de su suegro, un ascenso en la MNU (una corporación multinacional), en el departamento de Asunto Extraterrestres, Wikus queda al mando del operativo de reubicación de la colonia alienigena, tiene que ir a tocar puerta por puerta, notificarle al habitante en turno que será reubicado y obtener su firma de enterado, en dicho operativo un exceso de confianza le cambiará la vida, y el cuerpo. ¿así está bien? ¿o más Kafka?<br />
</div><div style="text-align: justify;">Bueno, de Kafka ya es suficiente, agreguemos entonces la noción de que el hombre jamás ha abandonado su estado larvario: las armas extraterrestres no funcionan en manos humanas, pero Wikus ya no es humano “completamente” y tal vez… porque mejor no hacer algunas pruebas al respecto, y ya casi todo está dicho: el pobre burocráta se convierte en la criatura más preciada de la corporación, por desgracia los científicos opinan que muerto y en pedazitos facilitaría mejor la investigación.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Lo que sigue es la catastrofe total, uno recuerda entonces que Neil Blomkamp fue contratado inicialmente para hacer la película de Halo, (el videojuego) y no un drama inter-espa-racial lleno de señalamientos al triste estado de las cosas, así que la cinta se olvida de todo lo anterior y vuelve a su origen. Distrito 9 se transforma en una simple pero efectiva película de acción, ya con las armas activadas cualquier fan del videojuego estará de lo más contento, mientras los amantes de la ciencia ficción tendremos que ubicarnos en la realidad, estamos viendo una película con una propuesta interesante pero con objetivos comunes: reventar la taquilla y nada más. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Es bastante probable que se realice una segunda parte, y al igual que Matrix hace una década, ésta será la cinta de la que se hable por un buen rato, salvo que mientras la cinta de los Wachowski nos obligó a replantearnos la realidad como un imposible, ahora Blomkamp nos muestra la triste realidad en que se ha estacionado el ser humano y luego nos ayuda a evadirla con fuegos pirotécnicos. Aún así, vale la pena.<br />
</div><div style="text-align: center;">< o o ><br />
</div><div style="text-align: center;">)!!(<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-45982685561865263592009-11-02T11:14:00.000-08:002009-11-02T11:14:01.340-08:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Su8szQ08IAI/AAAAAAAAADo/LSrOwfjWV4E/s1600-h/contrabandoweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://3.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/Su8szQ08IAI/AAAAAAAAADo/LSrOwfjWV4E/s320/contrabandoweb.jpg" vr="true" /></a><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Contrabando de sombras.</span> <em>Antonio José Ponte</em><br />
</div><div style="text-align: center;">Mondadori, 2002<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #274e13; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Pero Coño! Para qué tanto símbolo Chico!</strong></span><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Esta novela contiene casi todos los ingredientes que un lector excéntrico puede pedir: una isla como escenario, un cementerio, un fotografo extranjero, relaciones homosexuales, perros que ven fantasmas, un fantasma del pasado, saqueadores de tumbas, un vidente, un viaje a la adolescencia en un internado y un sueño donde se recrea la muerte a fuego de los “amujerados” en Cayo Puto.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Como es de esperarse, el resultado me indigestó un poco y al final no supe si el conflicto se resuelve o no (cuál conflicto?), si la novela me fue grata o sólo fue la curiosidad lo que me llevó hasta el final, en otras palabras, la novela promete demasiado y cumple con la mitad, es interesante, tiene sus momentos de intensidad, pero tambien tiene un exceso de personajes y eventos que considero innecesarios y unas alegorías que terminan por confundir y mezclar significados.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Al principio Renán le cuenta a Vladimir que el cementerio es el lugar “imposible” para coger, pero él ya ha cogido en ellos, y que no puede pasar frente a un cementerio sin tener una erección. Dicho esto, varios parrafos después Renán muere atropellado en la carretera. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Vladimir es un escritor contratado por medio de Lula, su amiga abogada, para realizar algunos textos para un fotográfo extranjero que va a casarse con una “mulatica” para sacarla de el país y que realizó algunas fotografias en el cementerio que esta frente a la casa de Susan, una amiga de Vladimir y Renán el muerto, ahí, mientras visita el lugar junto al fotográfo descubre a un joven con una mirada conocida: la de Miranda, su primer amante que murió en extrañas circunstancias en el internado donde transcurrió su adolescencia.<br />
</div><div style="text-align: justify;">César, el muchacho con la mirada de Miranda, es parte de un grupo de gente que ocasionalmente duerme en el cementerio, aparte de la mirada ajena, tambien tiene los zapatos de otro, los mocasines con que fue enterrado Renán, todas estas situaciones Vladimir las interpreta como señales del más allá, vuelve al pasado y trata de resolver el asunto de Miranda: porqué no tuvo el valor de proteger a Miranda cuando decidieron expulsarlo del internado y qué pasó realmente esa tarde en que su entrenador de natación le sugirió pasar más tiempo en la piscina y que fue la misma tarde en que murió Miranda.<br />
Luego Vladimir se relaciona con César, descubre a la pandilla de saqueadores de tumbas, conversa con Susan sobre todo y nada, en su apartamento alguien destruye sus libros mientras el está ausente y deja escrito en el muro la palabra “maricón”, igual que en el internado, para Vladimir esto sólo puede ser obra de un fantasma o de alguien que viene del pasado.<br />
</div><div style="text-align: justify;">César le cuenta su vida: su padre quería salir de la isla pero las autoridades no se lo permitieron, y los vecinos un día deciden darles un escarmiento a toda la familia, el padre los defiende y en el acto hiere a una chica en la pierna con una cubeta metálica llena de orina, el padre es enjuiciado, dura un tiempo en la cárcel y al salir se suicida, la chica lastimada resulta ser Lula, la abogada amiga de Vladimir, otro mensaje cifrado del tiempo (según él).<br />
</div><div style="text-align: justify;">Luego Vladimir es arrestado y ahí conoce a “Criatura” un hombre de mirada blanca, capaz de ver los sueños de los que duermen a su lado, aquí Vladimir sueña esta balsa que lleva una jaula llena de hombres a los que otros les lanzan brea hirviendo y plumas, y a los que les prenderán fuego apenas desembarquen en Cayo Puto. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Luego en el cementerio "Criatura" le dice a Vladimir que Renán va en esa barca, el final de la novela es Vladimir despertando una mañana con la convicción de volver ese día al cementerio. De ahí en más no pasó nada, y no es que yo quiera que pasen más cosas, sino que ese elaborado montaje de coincidencias y personajes deje algo en claro, todo queda sugerido y ese es su mayor problema, ninguna de todas las preguntas que se hace uno como lector obtiene respuesta: qué pasó con Miranda, con los maricones quemados, qué diablos hace la “mulatica” que se casa por interés con el fotografo, para mi sólo es un personaje accesorio que le estorba a la historia, y Criatura, qué es en realidad. <br />
</div><div style="text-align: justify;">Antonio José Ponte me deja con un montón de dudas y ni una sola certeza, tal vez algunos piensen que esa es una virtud, pero en este caso, no creo que esa haya sido la intención, con tal exceso de elementos y símbolos de los cuales ninguno sobresale, ni es constante, no me queda claro cual era la intención de toda la novela, tal vez abarcarlo todo y no decir nada. O tal vez decir algo esencial que se confundiera con todo el ruido que le pone alrededor. Yo elijo esto último, pero todavía no lo encuentro.<br />
</div><div style="text-align: center;">U_U<br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-8246897001038100540.post-64245387216639748812009-10-30T10:28:00.000-07:002009-10-30T10:28:49.894-07:00<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SusiOTgSBTI/AAAAAAAAADY/MsnMtIxnbiM/s1600-h/unadesolaweb.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://1.bp.blogspot.com/_2TUKuVxC6_4/SusiOTgSBTI/AAAAAAAAADY/MsnMtIxnbiM/s320/unadesolaweb.jpg" vr="true" /></a><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="font-size: large;">Una desolación.</span> <em>Yasmine Reza</em><br />
</div><div style="text-align: center;"><br />
</div><div style="text-align: center;">Anagrama, 2000<br />
</div><div style="text-align: center;"><span style="color: #073763; font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><strong>Mirando en el espejo las ruinas del tiempo</strong></span><br />
</div><div style="text-align: justify;">Envejecer no es un arte, tampoco una opción, mucho menos un oficio, ni se elige ni se aprende, sucede y nada más. Con el tiempo la enfermedad será sólo uno acumulación de errores y descuidos, y la soledad, un acto logrado por el azar y la fortuna, mientras esto pasa, es probable que los otros vayan cayendo uno a uno, y nosotros seremos testigos de nuestro propio abatamiento, hasta que llegue nuestro turno.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Samuel, el personaje de la novela breve de Yasmine Reza, es un judío francés, un viejo insatisfecho e inconforme, algo del presente lo mantiene furioso y no deja un solo instante de su vida sin enfrentarse a los nuevos tiempos, las nuevas ideas y lo peor de todo a la concepción actual de la felicidad, para Samuel eso no existe, no es real, es una mentira extendida a lo largo de toda la historia humana, algo para los que sueñan, y hasta ahí está bien, pero la felicidad no es para los que viven despiertos, para ellos, los que son como él no hay otra cosa que la insatisfacción, y de todas las personas felices que lo rodean, el que más le duele que haya caído en la trampa de los ilusos, es su propio hijo.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Una desolación es una largo monologo dirigido al hijo ausente, al “feliz” de la familia, al que viaja y recibe el sol de las playas, en que aparece de vez en cuando, el reclamo constante es “qué hace” de su vida, en que consiste ese “estar buscando su lugar” no lo entiende, ni quiere hacerlo, para Samuel tal cosa no existe, en ningún lugar el hombre puede estar en paz, ni siquiera consigo mismo, menos con todo ese pasado tras de si.<br />
</div><div style="text-align: justify;">Su segunda esposa se dedica a todas esas causas nobles que se inventa la gente para salvar al mundo y ha decidido dejar de salvarlo a él, su otra hija está casada con un farmacéutico (nada más apropiado para su extreñimiento crónico y los medicamentos infames) todo su tiempo lo pasa en su jardín mientras ve a su vecino, otro como él pero más extremo, alguien que ha decidido anclarse tras la ventana sin intenciones de nada.<br />
</div><div style="text-align: justify;">En toda la novela se lee una amargura densa e inpenetrable, es díficil entender la naturaleza de ese reclamo, esa angustia que le causa la supuesta pasividad del hijo y uno sospecha que todo va por el lado de no reproducirse, quien no lo hace, no se arriesga, quien no se atreve a quedarse en un sitio a críar a un hijo no quiere probarse nada, quien no siembra, y aquí entra la constante alegoría del jardín, jamás tendrá que preocuparse de nada.<br />
En una parte de la novela Samuel va al cementerio a limpiar la tumba de su padre, habla con él mientras talla la fría lapida, observa los guijarros dejados sobre la tumba y le pregunta a su fantasma si está contento, la respuesta es afirmativa, y entonces vuelve la angustia, ¿quién lavara la tumba de su hijo? <br />
</div><div style="text-align: justify;">Al final se encuentra con una vieja amiga Genevieve, amante de un amigo en común, cenan juntos y es en esa parte donde Samuel aparece como lo que es, un pobre viejo que no puede entender el mundo, jamás lo ha entendido, esta rueda de roca y musgo es un sitio infame y le parece incocebible que la gente busque la felicidad, que se ponga como meta única encontrar un estado de gracia perpetuo, Samuel insiste en que lo único real es este instante, y este instante no tiene gracia alguna, la fascinación es efimera y la memoria es lo único que nos queda ante tal desgracia, este dolor que carga es un largo arrepentimiento por no haber disfrutado las cosas, se dedicó a ser consciente de que todo tiene un final, y eso, si no sabemos entenderlo siempre amarga los actos desde el principio, Samuel ve hacía el pasado y descubre que ha hecho las cosas mal, pero en su situación ya no tiene sentido pensar mucho en el asunto, ¿arrepentirse? para qué, eso no cambia las cosas, uno va a morir y eso es todo.<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: center;">M M<br />
</div><div style="text-align: center;">M<br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Solzimerhttp://www.blogger.com/profile/14261852706374373630noreply@blogger.com0