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Los oscuros hábitos del caos
Artemisa Café
Israel Terrón Holtzeimer
Fondo Editorial Tierra Adentro, 2012

Federico es un hombre que jamás he tenido un objetivo en la vida, pasa de largo por las avenidas del desastre y el crimen, Diana, al contrario, es la sobreviviente de una desgracia, ha sido devorada literalmente por una ciudad en ruinas y desde la oscuridad ha resurgido como una ave fénix, incendiaria, pero sin alas. Humeante todavía, decide que todo debe arder, y Federico, por fin ha encontrado en ella un objetivo: su desgracia personal.
Artemisa Café arroja a dos personajes a recorrer los habituales pasillos del caos en un país que lleva un siglo cayéndose a pedazos y al que sólo le hacen falta unos cuantos empujones para terminar siendo un montón de polvo, esa es la fantasía que comparten Federico, Diana y ese grupo misterioso llamado Los Leopardos, sueñan con la venganza, el derrumbe, Federico, sólo busca que se extienda el vacío a su alrededor, que todos pierdan el alma en un instante, al menos, en eso anda hasta que encuentra a Diana, un ser sin nada, y cuyo vacío lo devora todo, un alma inquieta pero gris, una mujer entregada al aire, adicta a cruzar el vidrio de la droga y quedarse del otro lado, a pesar de lo tétrica y violenta que puede ser la novela, en ocasiones parece una especie de Alicia en el país de las pesadillas.
Los dos, juntos pero sin unirse nunca, no se enfrentan a nadie, más que a ellos mismos, un par de sombras difusas desde antes de conocerse, Diana regresó a casa de sus padres pero ya no fue la misma, Federico se unió a las fuerzas policíacas, su inteligencia lo fue elevando de cargo, pero él, indiferente al prestigio y al poder siguió en su búsqueda de la luminosa autodestrucción, consumiendo licor y tabaco al por mayor, sin temor a la muerte o al sufrimiento, entonces conoce a Diana, esa estrella de luz oscura, ese astro de masa negra que se inyecta galaxias en las venas para mantenerse alejada de este miserable mundo.
Alrededor de ellos el caos ha sufrido una variante, la Ciudad de México está en llamas, el gran cierre del desastre provocado por Los Leopardos y su misteriosa líder llamada Artemisa está a punto de culminar en los festejos del bicentenario, la misión de Federico es encontrar a dicha líder, tiene sus sospechas, cree que es Diana, pero cómo saberlo si ella se ha pasado los últimos días pegada a su encendedor quemando oscuridad, y diluyendo el fin del mundo en su cuchara plata.
Ellos dos, los herederos del caos pasan el tiempo recordando quiénes fueron, qué les hizo la vida, como el corazón se les fue endureciendo desde hace muchos años, contemplan el fin de la ciudad que fue el origen de este país abismado en su propia indiferencia.
Violenta y salpicada de un humor negro poco habitual, Artemisa Café es un viaje misántropico de alto nivel, sin nada de aprecio a lo que la sociedad ha decidido llamar vida, Diana y Federico son dos cuervos negros dispuestos al exterminio y al descenso, dos personajes que se preguntan ¿para qué lanzar fuegos pirotécnicos si tenemos bastante dinamita?

P.D.: Artemisa Café obtuvo el Premio Binacional de Novela Border of Words en 2012, el jurado estuvo integrado por Guadalupe Nettel, Julián Herbert y  Héctor Anaya.

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